Mientras las productores y sus entidades, reunidos en asamblea, denunciaron que las medidas anunciadas por Sergio Massa como paliativo a los daños provocados por la sequía no se están insturmentando en tiempo y forma, el Ministerio de Economía insiste en los anuncios: lanzó una línea de créditos por 4.500 millones de pesos para asistir a pequeñas y medianas empresas del sector agroindustrial afectadas por las contingencias climáticas. La tasa será subsidiada con recursos de la Secretaría de Agricultura.
Este plan de créditos, que algunos consideran un salvavidas de plomo porque no sirve de nada un préstamos para alguien que no puede pagar deudas previamente contraídas porque directamente no tendrá ganancias este año, serán ejecutados por el Banco Argentino de Desarrollo (BICE) y con bonificación de tasa del Fondo Fiduciario Nacional de Agroindustria (Fondagro), que depende de Agricultura.
El financiamiento fue anunciado tras la firma de un convenio entre los secretarios de Industria, José Ignacio de Mendiguren, y su par de Agricultura, Juan José Bahillo, junto al presidente del BICE, Mariano de Miguel. En un comunicado, Industria precisó que la línea de créditos “alcanzará a proyectos de inversión productiva y compra de bienes de capital de mipymes de todo el país”.
“Esta decisión responde al paquete de medidas que puso en marcha el ministro (de Economía) Sergio Massa para asistir a un sector clave de la economía nacional que se encuentra afectado por la sequía”, señaló De Mendiguren, quien sostuvo que se busca “acompañar a las empresas del sector para que puedan enfrentar este contexto tan adverso”.
Por su parte, Bahillo aseguró que la prioridad “sigue siendo que ningún productor deje de producir, sembrar e invertir”, y agregó que la decisión de Massa “es generar las medidas necesarias para que nuestros productores puedan afrontar esta delicada situación sin comprometer sus capitales de trabajo”.
Industria detalló que los créditos están destinados a proyectos de inversión y adquisición de bienes de capital nuevos de mipymes del sector agroalimentario que se dediquen a cultivo de hortalizas, producción de leche bovina, cría de aves de corral, apicultura y frigoríficos. Para bioeconomía se financiará hasta el 20% del capital de trabajo, en el marco de proyectos de inversión aprobados.
Los préstamos ya se encuentran disponibles a un plazo de hasta 60 meses (con hasta 12 meses de gracia) y un monto máximo de hasta 75 millones de pesos por beneficiario o grupo económico con un plazo de hasta 84 meses y hasta 24 meses de gracia para el pago de capital.
La bonificación de tasa es de 10 puntos porcentuales anuales por parte del Fondagro, permitiendo que las empresas accedan a una tasa del 49% fija durante los primeros dos años y Badlar menos cuatro desde el tercer al quinto año.
En los próximos días, la línea se ampliará con 1.500 millones de pesos para el descuento de cheques (electrónicos y físicos) que BICE ofrece al sector agropecuario y una bonificación de tasa de 8 puntos porcentuales anuales para productores de hortalizas, leche bovina, cría de aves de corral, apicultura, frigoríficos, biotecnología agropecuaria, biomateriales, bioinsumos y bioenergía.
En este caso, el plazo del instrumento es de hasta 365 días, acorde al periodo anual de la siembra/cosecha, con un monto máximo sujeto a reducción de 35 millones de dólares.
Agricultura, a través de Fondagro, destina 750 millones para bonificación de tasas. Este fondo fue creado por la ley de Presupuesto de 2017, en el gestión de Cambiemos, con el sentido de intervenir en las economías regionales. Ahora mudó hacia un fideicomiso de administración y financiero, con el objetivo de incentivar, fomentar y desarrollar el sector agroindustrial; la sanidad y calidad vegetal, animal y alimentaria; el desarrollo territorial y la agricultura familiar.