El último informe mensual oficial publicado por la Secretaría de Agricultura se proyecta una exportación argentina de poroto de soja de 8,20 millones de toneladas para el presente ciclo comercial 2024/25.
Sin embargo, la fortaleza de la demanda china –impulsada por factores geopolíticos en el marco de negociaciones comerciales emprendidas con EE.UU.– ya hizo que tales previsiones quedaran obsoletas.
Hasta el momento se registraron Declaraciones Juradas de Ventas Externas (DJVE) de poroto de soja por 8,41 millones de toneladas y todo indica que esa cifra seguirá creciendo en lo sucesivo.
El mes pasado los embarques argentinos de poroto de soja superaron los 1,3 millones de toneladas, una cifra cuatro veces mayor a la registrada en julio del 2024. “Esa tendencia se está intensificando en agosto, que ya promediando el mes se embarcaron 568.000 toneladas de soja y hay programadas 1,3 millones más para cargar. De cumplirse el ‘line-up’, podríamos llegar a tener el segundo mejor agosto de la historia en cuanto a exportaciones de soja”, destaca un informe de la Bolsa de Comercio de Rosario.
China viene siendo el principal impulsor de la demanda de poroto argentino. “A contramano de las expectativas del presidente Donald Trump, China viene importando soja a un ritmo récord y acrecentando sus existencias de poroto. Con 70 millones de toneladas en los primeros siete meses del año, China batió cualquier marca y Brasil se posiciona como el principal origen. Sin embargo, hay cada vez más porotos argentinos que marcan el pasaporte para llegar al continente asiático, predominando cada vez más la soja sudamericana”, remarca el informe.
Esta dinámica hizo que los precios de exportación subieran a lo largo de la campaña. Para el embarque más cercano, el FOB soja desde las terminales del Gran Rosario supera actualmente 430 u$s/tonelada, cuándo hacia abril y principios de mayo pasado se negociaba entre 380 y 397 u$s/tonelada.
Mientras que la harina de soja está enfrentando precios decrecientes, eso se compensa en parte por la firmeza del valor del aceite de soja a partir del programa de promoción de uso interno de biodiésel instrumentado en EE.UU. y Brasil.
De todas maneras, al comparar el evolución del precio FOB del poroto versus el precio compuesto industrial (promedio ponderado entre aceite y harina), es factible advertir que la exportación ganó mucho competitividad relativa en los últimos meses.
“Desde que arrancó la campaña ha habido una convergencia desde abajo hacia arriba en favor de la exportación directa de soja –impulsada por la alta demanda del grano– en detrimento del bajo precio de la harina”, explica el informe.
Hasta ahora, el sector exportador compró 6,90 millones de soja 2024/25 en el mercado interno y hasta agosto exportaría 5,5 millones. Teniendo en cuenta que las registraciones en DJVE anotadas para la campaña ascienden a 8,41 millones, sin tener en consideración stocks, aún restarían por originar 1,50 millones de soja para cumplir con las ventas estipuladas.