Las mayor parte de las grandes consignatarias de hacienda tiene una larga trayectoria en el rubro y en la producción pecuaria, pero hay una que es mucho más joven y que, sobre todo en los últimos años, se transformó el líder de la comercialización de ganado. El pasado martes esta empresa celebró 42 años en la actividad.
Se trata de la firma Alfredo Sebastián Mondino, que surgió en Del Campillo, un pequeño pueblo de Córdoba. Su fundador, Alfredo, arrancó el negocio poco antes de que volviera la democracia. Batalló con los sucesivos planes económicos del alfonsinismo hasta que la hiperinflación, y la caída del Hogar Obrero en el 90, lo dejaron patas para arriba.
El Hogar Obrero era una cooperativa fundada a inicios del siglo pasado por Juan B. Justo, que daba créditos a sus asociados. Increíblemente, llegó a contar con más de 2 millones y Mondino ella uno de ellos.
“A valores de hoy, a mi papá le debía mil hectáreas pero tenía cerca de 300”, contó Roberto Mondino, hijo de Alfredo, a Bichos de Campo.
“Los familiares y amigos que no retiraban el dinero de las jaulas, más otros que traían ahorros, sostuvieron la empresa y no dejaron que se cayera”, recordó el consignatario.
Los hijos de Alfredo son cinco: tres mujeres que no participan del negocio, y dos varones que desde hace unos años tienen la batuta en la mano e impulsaron un renovado desarrollo de la empresa.
“Durante muchos años mis padres hicieron raíces fuertes, sólidas, y cuándo entró Marcos y después yo, pudimos hacer crecer la empresa siempre sostenidos por esas raíces”, explicó Roberto.
Su ingreso a la empresa se dio a sus jóvenes 25 años, mientras que Marcos arrancó un poco antes. “Lo que no quería era ser un feriero más en el interior. Así que a esa edad me fui a vivir a Huidobro y abrí la primera sucursal. Luego vinieron muchas más. Hoy estamos en casi todo el país y trabajamos con las empresas más importantes del rubro”, celebró el empresario.
La otra pata fuerte de la firma es Marcos, el gerente general del negocio que además produce granos, tiene una planta de silo, hace cría y engorde a corral, funciona como inmobiliaria rural y tiene transporte de productos agropecuarios.
La empresa cuenta hoy con 400 empleados, 50 de los cuales se dedican a la comercialización de hacienda. Es un equipo joven que recorre los campos en busca de dar un servicio que sirva a todos los operadores: criadores, engordadores e industria.
“En la consignataria lo que armamos es un equipo de gente joven, con entusiasmo y preparada. Al mismo tiempo nos organizamos financieramente para tener el respaldo necesario ante cualquier inconveniente. Tenemos siempre fresco el traspié de mi viejo. Eso fue clave en el desarrollo de la empresa. De los dificultades se aprende y mucho”, finalizó Mondino.