Muchos empresarios agropecuarios ha perdido las altas expectativas que tenían al inicio del gobierno de Cambiemos. El bajón que el último tiempo registró el “índice de confianza” elaborado a partir de las opiniones de los productores fue casi tan pronunciado como la tristeza que sentimos todos cuando nos enteramos de que la griega Victoria Xipolitakis planea divorciarse a poco de su casamiento. Y todo a solo un par de días de haber dado a luz a su primogénito.
Pongamos números sobre la mesa para que esta decepción no quede solo en el terreno de las percepciones. El Índice de Confianza del Empresario Agropecuario (ICEA) se ubicó en 43,4 puntos en su última medición, correspondiente a noviembre, y es casi el mismo que se registraba en 2015, justo antes del proceso electoral que desencadenó en la derrota del kirchnerismo y la asunción de Mauricio Macri a la presidencia.
En los primeros meses de esta gestión, el ICEA se había ido a las nubes y todo era derroche de optimismo. Trepó por arriba de los 70 puntos, a pesar de las dificultades económicas y los desastres naturales que afectaron a los productores. Ahora volvió a la chatura de los años previos a este proceso de ilusión colectiva. Macri ingresó a las vidas de estos empresarios y nació el amor. Pero ante la primera dificultad las cosas cambiaron . La desilusión parece haber sido tan grande como la que sintió Xipolitakis con su marido.
Para decirlo en criollo, cuando “la Griega” andaba saliendo con el líder de La Cámpora, José Ottavis, nadie apostaba ni un poroto por ellos. A este nuevo chico, en cambio, le dábamos un poco más de crédito. ¡Púfate! Nos equivocamos de nuevo.
Podría ser otro estudio cualquiera, manipulado para hacer daño al gobierno. Pero este índice es elaborado por los Grupos CREA, y ese es todo un dato sabiendo que esta ha sido la entidad agropecuaria que más de sus hombres le prestó al macrismo para formar sus equipos de gobierno. No hay espacio, ni chiquito ni grande, para dudar de su objetividad.
El ICEA es calculado por la Unidad de Investigación y Desarrollo de CREA desde noviembre de 2012, con una periodicidad cuatrimestral (marzo, julio y noviembre). Para eso se realizan a muchos empresarios y técnicos vinculados a la entidad seis preguntas sobre percepción y expectativas, las cuales son relevadas mediante el Sistema de Encuestas Agropecuarias (SEA-CREA). El dato reciente y relevante es que, en esta última encuesta, el índice fue desarrollado además con el soporte académico de la Facultad de Ciencias Económicas (CMA-PROGIRA) de la Universidad de Buenos Aires.
En un informa, al divulgar los últoimos resultados, AACREA contó que la evolución histórica del ICEA muestra cuatro etapas:
- La primera de ellas, de noviembre de 2012 a noviembre de 2014, donde el índice fluctúa relativamente estable entre un máximo de 38,9 (marzo de 2014) y un nivel mínimo de 26,7 (julio de 2013).
- Entre noviembre de 2014 y noviembre de 2015 no existió un patrón definido, sino que evidenció oscilaciones derivadas de la incertidumbre política y económica generada por las elecciones presidenciales llevadas a cabo en octubre de 2015 y el ballotage en noviembre de ese año.
- La tercera etapa se inicia en noviembre de 2015, donde el indicador comienza a crecer hasta alcanzar valores superiores a 70 en la mayor parte de 2016 y 2017 (con un máximo de 75 en noviembre de 2016).
- Por último, la cuarta etapa, se manifiesta a partir del noviembre 2017, donde el indicador inicia un paulatino y sostenido descenso hasta alcanzar un nivel de 43,4 en noviembre pasado, una reducción de 5,9 respecto a la medición de julio de 2018 y una caída de 27,8 puntos en relación a noviembre de 2017.
“Es importante mencionar que en todos los casos los valores cayeron tanto cuatrimestral como interanualmente”, describe AACREA el panorama. Vale recordar que en medio sucedió una cosa letal para ganarse la confianza de los productores: Luego de varios meses de negar que lo haría, el presidente Macri cedió a la reimplantación de las retenciones agrícolas, que él mismo se había ocupado de eliminar (salvo para la soja) cuando llegó al poder.
El informe completa que los índices de confianza de los productores pueden ser calculados para una actividad específica. Así las cosas:
- El índice que considera sólo empresas que desarrollan la actividad agrícola fue 42,7 y se ubicó por debajo del promedio general de 43,4. Este valor se encuentra 7,2 puntos por debajo de julio 2018 y 25,8 por debajo de noviembre de 2017.
- El índice que considera sólo empresas que desarrollan la actividad de ganadería bovina fue 43,6, algo por encima del promedio. De todos modos, este valor está 5,3 puntos por debajo de julio 2018 y 18,4 por debajo de noviembre de 2017.
Según el trabajo, “los resultados antes desarrollados muestran un deterioro tanto en la percepción (situación actual versus un año atrás) como en las expectativas (situación actual versus las que se esperan para noviembre 2019) de los empresarios agropecuarios. Dicho deterioro se expresa, en mayor medida, en la situación económica del país y del sector”.
La metodología y presentación de resultados del presente trabajo (“Índice de confianza de los empresarios agropecuarios en Argentina”), realizado por Miguel Fusco, Laura Pederiva y Esteban Barelli, fueron publicados en la Revista de Investigación en Modelos Financieros del Centro de Investigación en Métodos Cuantitativos Aplicados a la Economía y la Gestión de la Facultad de Ciencias Económicas de la UBA.