En los próximos días las autoridades de la Comisión Nacional de Valores (CNV) publicarán una resolución para permitir que los Agentes de Liquidación y Compensación (Alycs) puedan seguir ofreciendo servicios agrícolas.
En agosto pasado, por medio de la resolución 898/2021, se había establecido que, ante “la necesidad de establecer limitaciones al desarrollo de aquellas actividades no fiscalizadas por la CNV y ajenas al ámbito financiero que incrementan el riesgo operativo de los Alyc”, éstas debían dejar de realizar corretaje y canjes de granos.
La norma implica una complicación importante, porque muchas Alycs, además de realizar operaciones auditadas por la CNV, como las correspondientes a los contratos de futuros agrícolas y de divisas, también prestan servicios de ventas de granos en el disponible, forwards y canjes, de manera tal de ofrecer todos los servicios requeridos por las empresas agropecuarias.
¿Qué tendrían que hacer entonces las Alycs que ofrecen todo el “paquete” completo? La normativa de la CNV no dice nada al respecto, pero está claro que, si quisieran seguir ofreciendo los servicios que el organismo las obliga a descartar, deberían formar una nueva sociedad para ofrecer por medio de la misma los servicios no fiscalizados por la CNV.
Tal medida, tomada luego de los desfalcos generados por BLD y GyT, motivó una serie de reuniones entre representantes de las Alycs y la CNV, en las cuales se explicó a los funcionarios que la nueva norma introduce una complicación innecesaria en el sistema de comercialización agrícola.
Luego de una serie de diálogos fructíferos, las autoridades de la CNV dispusieron dar marcha atrás con la resolución 898/2021, pero a cambio introducirán una serie de exigencias adicionales a las Alycs que quieran seguir realizando operaciones físicas de granos.
Tales exigencias –cuyo detalle se conocerá en los próximos días– estarán orientadas a brindar las garantías necesarias para evitar que puedan aparecer casos como los de BLD y GyT, en los cuales posicionamientos comerciales en mercadería física (que no son auditados por ningún organismo) se emplearon para realizar maniobras financieras imprudentes que terminaron perjudicando a muchos productores e inversores por igual.