Se demora la apertura de las exportaciones de carne vacuna. La semana pasada el ministro de Agricultura Julián Domínguez anunció que se iba a liberar el cupo del 50% de las ventas a China que representan la mayor parte de lo que vende el país. Eso sumado a las cuotas con países ya liberadas implicaría que el cepo quedaría acotado a los 7 cortes populares y prohibidos de vender al extranjero más algunos otros países como Chile.
El ministro habló de que la medida de apertura estaría vigente a partir del lunes, pero eso no sucedió. Por eso se esperaban novedades en una reunión especial del funcionario con la Mesa de las Carnes, que agrupa a toda esa cadena. Pero nada.
Del encuentro no participaron varias entidades, entre ellas algunas de las entidades de la producción y de las razas de criadores, que son los más perjudicados por la medida, en tanto de alguna manera el resto de la cadena descarga sobre ellos los prejuicios reduciendo los precios de la hacienda.
En la práctica, tras el anuncio muchos se ilusionaron con que finalmente se iba a poder exportar casi el 90% de lo que venía despachando la Argentina. Pero van pasando los días y no hay novedades.
La reunión de la Mesa de las Carnes, que coordina el ex ruralista Dardo Chiesa, se realizó en la Bolsa de Cereales de Buenos Aires con Domínguez y su subsecretario de Ganadería, “Cacho” Romero. Quienes participaron del encuentro dicen que el ministro fue claro en sostener que la salida para el sector y para el país pasa por la exportación. Sonó contradictorio teniendo en cuenta las limitaciones que impone el gobierno en diferentes mercados tanto por derechos de exportación como con otro tipo de medidas. Ebn el caso de la carne, hay cupos de exportación vigentes desde junio pasado.
Cuando a Dominguez se le pidieron respuestas concretas respecto de la publicación de la normativa prometida para relajar un poco más ese cepo, no hubo precisiones ni respecto de la carne producida y acumulada en cámaras, ni sobre de la participación en el negocio de las plantas sin past performance. Tampoco hubo precisiones sobre los operadores sin planta ni sobre la apertura de la venta a China.
Entre los más optimistas hay algunos operadores de la industria que creen que en los próximos días podría haber novedades. También están los más descreídos y pesimistas que creen que hasta después de las legislativas no habrá novedades, ya que Domínguez anticipó que la carne es un “bien cultural” y que el gobierno no quiere que se le escapen los precios. La otra variable que entra en juego es la posibilidad de un nuevo acuerdo de precios para lso cortes populares con los frigoríficos exportadores, que podría anunciarse en las próximas horas e implicaría unas 30 mil toneladas para vender a través de los supermercados hasta fin de año. Si eso sale bien, argumentó el ministro, podría acelerar el proceso de reapertura exportadora.
Pero hay otra cuestión a tener en cuenta: se supone que para el cierre del año habrá un faltante notable de hacienda por la caída en los encierres a corral. En ese contexto crecen las dudas respecto de la posibilidad de la anunciada apertura exportadora que Domínguez prometió con énfasis hace una semana pero que se demora.