Para Julio Currás, el coordinador de políticas para la agricultura familiar desde el Ministerio de Agroindustria, el gran desafío de esta gestión será lograr que los pequeños productores agropecuarios sena sujetos de crédito en Argentina.
“No es un problema de los bancos, sino del sistema financiero de la Argentina y de la falta de políticas de Estado que tuvimos al momento. Esto es lo que tenemos que superar, y debemos dar acceso diferenciado a los pequeños y medianos productores. No pedimos que se regale nada”, subrayó el director nacional de Fortalecimiento Institucional y apoyo a las organizaciones de la Agricultura Familiar en diálogo con Bichos de Campo.
El ex vicepresidente de Federación Agraria (FAA) inventó una nueva palabra: Renafeados, en referencia a los productores incluidos en el Registro Nacional de la Agricultura Familiar (RENAF).
“Estamos viendo la posibilidad de que, con el hecho de que ese productor esté ‘renafeado´, automáticamente quede inscrito también en el Senasa, en la Afip y que sea una carta de presentación para el Banco Nación o el Provincia. Si ese productor ya está en el Registro Nacional de Agricultura Familiar, podrá darse el cruce de datos de todos los organismos para evaluar el otorgamiento de un crédito”, especuló.
Esto es lo que nos decía Julio Currás:
Pero hay un problema: no se sabe si todos los que están inscriptos en el RENAF son realmente pequeños productores agropecuarios. Currás confirmó que debe llevarse a cabo una depuración de ese Registro Oficial, ya que “no todos son de esta escala y hemos encontrado incluso personas que no eran ni productores. Por eso estamos haciendo un reempadronamiento para limpiarlo como corresponde, luego ordenarlo para que el universo de productores esté bien diferenciado, y por último hacer políticas crediticias diferenciales para que todos esos productores que hoy están marginados dentro de este modelo económico, puedan verse integrados”.
Por último, Currás dijo que “hay un compromiso del ministro Luis Miguel Etchevehere en que esto se cumpla, dado que considera que las economías regionales y la agricultura familiar es parte del corazón de Agroindustria. Demostraron voluntad de poder hacer cosas. Lo que hay que hacer es dejar de hacer las cosas mal. Sólo así encontraremos al pequeño productor mejor identificado”.