El secretario de Agricultura, Ganadería y Pesca, Julián Echazarreta, afirma que en la cartera agropecuaria poseen expectativas productivas “muy buenas” respecto a la campaña 2020/21 que comenzó hace algunas semanas, aunque puso reparos sobre el clima por el fenómeno climáticos de La Niña.
Por otro lado, en una larga entrevista con la agencia Télam, el funcionario indicó que el cobro de las compensaciones por parte de los pequeños y medianos productores podrían comenzar entre el miércoles y el jueves de esta semana y que los beneficiarios totalizan 37.818 en esta primera tanda.
-¿Qué expectativas tiene para esta campaña?
-Las expectativas son muy buenas, pero condicionadas al clima. Es buena porque se ha invertido mucho en fertilizantes, fitosanitarios, semillas y diría que tiene una buena preparación. Se va a sembrar con muchas ganas, pero, ciertamente, asustado por el pronóstico de Niña. Posiblemente, en algunos sectores se sembrará más soja que maíz en función de la mayor plasticidad de la oleaginosa. Creemos que también va a crecer un poco el área de sorgo. Si bien hemos tenido algunas lluvias para asegurar la siembra y habría alguna prevención respecto a la acumulación de humedad por debajo, existe la amenaza de una Niña moderada que nos haga mezquinar humedad en diciembre y enero.
-¿Qué esperan de las subas en los precios de los granos?
-Estamos ante muy buenas perspectivas. El rally que nos regaló el mercado internacional en relación a los ajustes stock/consumo en función de la previsión de que se está concibiendo que el crecimiento y la demanda de China están aseguradas y la superación de la pandemia nos dan un panorama que tanto desde el punto de vista de los fundamentals y technicals, el mercado está sano y fuerte. Eso mejora todo, pero también tiene su parte estresante hacia nuestra economía, porque los precios internacionales suben y eso tiene un reflejo en nuestra molinería, en la industria del etanol y la ganadería. Nunca la felicidad es completa. Las tendencias nos indican que el sector productor y el industrial, al que se le restituyó el diferencial, tienen perspectivas de una buena campaña.
-El viernes se aprobó el pago de compensaciones a pequeños productores de soja. ¿A cuántos beneficia y cuándo podrán cobrar?
-Son 37.818. Sin embargo, hay todavía más productores hasta totalizar un poco más de 41.000 que tienen derecho a percibir, pero esta diferencia responde a que algunos no han vendido o no tenemos todavía registro de sus ventas. No más allá del miércoles o jueves empezarán a cobrar. Hay algunas tramitaciones de índole bancario que hay que resolver y no más.
-Cuando se anunció este plan hubo una suerte de desconfianza de algunos sectores, ¿Por qué cree que se dio?
-Es una año muy difícil. Cuando se pensó esto que era para compensar este segmento de productores estábamos en una dificultad de una economía que estaba pendiente de ordenar, que aún lo está, y no estaba acordado nada con los acreedores ni el FMI. Había ciertas razonables causas de tener alguna reserva. También había algunas discusiones, mensajes políticos de algunos sectores que podían dar lugar a no tener demasiada esperanza. Pero el ministro Luis Basterra cumplió con su palabra.
-Hubo ciertos incentivos para que los productores comercializarán su producción, pero no se dio ¿Qué es lo que lo impidió?
-Son muchos factores. Ante no tener una alternativa de inversión que sea atractiva, si el productor que defiende su ahorro que es la cosecha con un mercado en alza se queda en su posición. Es razonable, legítimo y su forma de ahorrar para llegar a la campaña. No es menos cierto que hay una brecha importante en materia cambiaria que genera incertidumbre o mayores expectativas de alza. Es una medida defensiva, pero es una cuestión circunstancial, ya se normalizará y retomará un camino de diálogo como el que hay. No olvidemos que hay una cuestión cultural, que cuando sube el mercado no vende y se maneja con la estacionalidad.
-¿Qué se prevé en este sentido para los próximos meses?
-Son varios factores los que están haciendo mejorar la cosa. Ahora, el proceso de la toma de confianza lleva su tiempo, una maduración. Con una buena cosecha, vamos a tener una comercialización mucho más racional. Ya el año pasado, en diciembre, se comercializó en forma anticipada muchísimo. Hoy estamos volviendo a los guarismos más normales.
-¿Se pueden esperar alguna medida en el corto plazo en las negociaciones con el Consejo Agroindustrial?
-El compromiso es tener medidas positivas e importantes en el corto plazo. Pero ¿cuánto es el corto plazo? No son días, pueden ser semanas o meses. Transitar el camino ha sido muy positivo y creo que lo que se va a lograr en el corto plazo también va a ser positivo.
-¿Se puede hablar de la baja de alguna retención a algún producto?
-Los derechos de exportación son un tema permanentemente discutido y hablado. En el medio de los derechos de exportación hay una serie de tributos y costos que se pueden mejorar. Eso es lo que se está trabajando. También está el impuesto a las ganancias, cuestiones de amortizaciones aceleradas. Hay muchas cuestiones que pueden resultar una mejora y un atractivo para la inversión productiva, incremental y mayor exportación y provisión al mercado doméstico.