Según Wikipedia, Luis Burela y Saavedra fue un hacendado y militar argentino, “que inició la lucha independentista defensiva en el norte de su nuevo país, llamada habitualmente la guerra gaucha”. Además de este evento histórico, Burela participó de muchos hitos militares de Argentina a lo largo de su vida, que finalizó en 1834, y por quien se bautizó una localidad del departamento Anta de la provincia de Salta.
Quizá marcado por la guerra gaucha que lo tuvo a Burela de protagonista encabezando un levantamiento rural de pequeños productores contra las familias realistas, Hugo Flores, histórico productor tabacalero de Chicoana, decidió nombrar su emprendimiento familiar de elaboración de puros como el prócer salteño.
“Puros Coronel Luis Burela” nació en 2018 de la mano de Flores, quien jubilado de la actividad principal del Valle de Lerma, el tabaco, diversificó sus tareas y comenzó una aventura llamativa, y que normalmente se relaciona con países caribeños como Cuba.
Esta región salteña es conocida por su imponente producción tabacalera, donde casi la totalidad es variedad Virginia, y es entregado a las cooperativas tabacaleras para la elaboración de cigarrillos. Todo este valle productivo tiene una cultura devenida de esta actividad, pues son más de 25 mil familias las que viven del tabaco de forma directa y todos los pueblos que lo conforman dependen en gran medida de este cultivo.
Así fue que en el 2018, el INTA decidió investigar de la mano de Marcelo Rodríguez, director del Instituto a nivel regional, qué hacer con variedades “olvidadas” de tabaco negro: Criollo o Burley entre otras. Y así fue como en conjunto con la ya extinta Secretaría de Agricultura Familiar, se decidió probar con variedades de tabaco negro para la elaboración de puros, y eso fue lo que llevó a un cambio en la cabeza de Flores.
Cansado de una vida entera de la producción de tabaco para la industria, se jubiló de la actividad y decidió plantar estas variedades pensando exclusivamente en los puros para fumar, en detrimento de la industria. A la actividad a campo la sigue su hijo, pero Hugo mantiene la producción de estas tres variedades, con el fin de usarlo para los puros, que insumen estas hojas y no las Viriginia.
Pero Hugo no sabía nada de puros, solo fumó alguno eventualmente, hasta 2018. Allí, de la mano del INTA y de la Cámara del Tabaco de Salta, se contrató al técnico capacitador cubano Eliecer Velázquez Marrero, dando puntapié a las capacitaciones que no se detuvieron hasta la fecha.
En ese entonces, Hugo junto a 60 personas de los distintos pueblos se fueron constituyendo en grupos de trabajo en El Carril, Chicoana, Coronel Moldes, Rosario de Lerma, y Guachipas. Este trabajo mancomunado de una región, llevó a que hoy muchas familias, se dediquen a trabajar elaborando puros de altísima calidad en sus casas y produciendo sus tabacos.
Flores, aprendiz de la primera camada, explica a Bichos de Campo que los puros que se realizan en esta zona, son únicos por su característica de ser hechos a mano, con la cultura ancestral de los pobladores del manejo del cultivo, y además porque están hechos con hojas de las tres variedades, a diferencia de los de otras latitudes, que se hacen con una sola.
Mirá la entrevista completa con Hugo Flores:
Como muchos otros, elaborando los puros en el patio de su casa de El Carril, Flores explica: “Mi padre fue productor de tabaco, yo sí he seguido lo de él, produciendo Virginia y actualmente está mi hijo. Yo en este momento estoy jubilado”.
Según Flores, esto era desconocido hasta 2018, dado que la zona producía tabaco y lo entregaba a la industria. Miles de personas empleadas por esta economía productiva, abocadas en algo nocivo. Sin embargo, según Flores el puro no es adictivo, es natural, y no tiene la mala prensa que su primo el cigarrillo.
“No conocía a nadie el puro acá en Salta. Era desconocido el armado del puro. Así que nosotros lo empezamos a armar, y empezamos a producir el puro y a venderlo de boca en boca, a una persona, otra persona. Hoy en día ya está conocido acá en la provincia de Salta. Estamos mandando productos para Buenos Aires, el Sur, Santa Cruz, Santiago del Estero, Córdoba, y ya hay algunos puros también en Europa, en España y en Italia”, completa el elaborador.
Si bien Hugo está al mando, son dos mujeres las que tienen la fama de ser las mejores elaborando puros, su esposa y Emilia Salas, que trabaja junto a ellos. A todos ellos, les enseñó Velázquez Marrero, armador cubano de muchos años de trayectoria en la fábrica Cohiba de Cuba: “Es una persona que tiene mucho conocimiento, y ese conocimiento nos lo transmitió a nosotros y nosotros estamos dándole la impronta de cada armador de puros”, dice Flores.
Respecto de pensar el cultivo para el puro, no es solo la elección de la variedad: “Nosotros desde los almácigos, seleccionamos la semillita que es exclusivamente para armar el puro. En el trabajo en el campo es distinto porque no es un producto orgánico, pero tratamos de que tenga la menor cantidad de productos que sean contaminantes. Trabajamos el campo en una superficie relativamente chiquitita. Nosotros para los armadores de puros de acá de Chicona, con media hectárea de tabaco, que más o menos producimos mil kilos de tabaco, podemos armar los puros durante todo el año” resume Hugo.
Para finalizar la visita de este medio a la sala de elaboración de puros salteños Coronel Luis Burela, Flores resume: “Las personas que vienen a Salta se llevan varios souvenirs, y entre eso estaría el puro que estamos armando nosotros. Se puede llevar un poncho, un vino y algunas otras cosas más, y entre eso un puro salteño. La gente está conociendo realmente qué es lo que se puede hacer y qué es la capacidad que tiene la provincia de Salta de brindar esto a la gente que nos visita, a la gente del turismo”.