El secretario de Agroindustria, Luis Miguel Etchevehere, y el titular del Senasa, Ricardo “Ricky” Negri, anticiparon en sus redes sociales que la Argentina logró un acuerdo con Brasil para permitir el ingreso a ese país de peras y manzanas del Alto Valle de Río Negro y Neuquén. Ese comercio había sido suspendido una semana atrás, ante la aparición de la plaga carpocapsa en una decena de camiones.
Negri, que viajó el miércoles a Brasil para mantener negociaciones con sus pares del servicio sanitario de ese país, se mostró entusiasta con los términos del acuerdo, que demandó casi 24 horas de discusiones y hasta un “cuarto intermedio”. El funcionario dijo: “Con el equipo de Senasa hoy logramos que Brasil levante la suspensión para peras y manzanas. Esta es una buena oportunidad para que todos los actores de la cadena sigamos generando confianza para seguir vendiendo nuestros productos al mundo”, evaluó.
Segundos antes, había sido Etchevehere el primero en comunicar la buena noticia, que resulta ser un bálsamo para una economía regional muy dependiente de las compras de Brasil. Ese país importa manzanas y peras de la patagonia norte por unso 150 millones de dólares anuales. Y absorbe cerca del 25% de los volúmenes exportados de ambas frutas. Todos los operadores coinciden que si se hubiera mantenido cerrado mucho más tiempo, hubiéramos estado frente a una catástrofe comercial para los productores y empacadores del Alto Valle.
Esta situación de bloqueo a las exportaciones de peras y manzanas ya se había producido en 2015 y tuvo consecuencias dramáticas en la economía regional frutícola. Aquel entredicho se resolvió cuando Senasa acordó con Brasil la puesta en vigencia de un protocolo sanitario para controlar todas las cargas de frutas derivadas hacia el vecino país.
Ese plan de mitigación de riesgos, sin embargo, debe haber fallado, pues a principios de febrero Brasil detectó la presencia de la plaga Carpocapsa en nueve camiones cargados de fruta argentina. Brasil es un país libre de esa plaga, el tradicional gusano de las manzanas, mientras que en Río Negro la presencia del insecto se ha ido agravando por la gran cantidad de fincas abandonadas en los últimos años y las dificultades económicas de los productores, que quedan sin recursos para hacer los tratamientos necesarios.
Más tarde, en un comunicado oficial, confirmaron el acuerdo, y aseguraron que el mismo “se concretará a partir de la publicación en el Boletín Oficial brasilero”, en tanto que “Argentina agudizará para la presente campaña los monitoreos y controles en la producción de ambas frutas”.
La delegación de la Argentina que viajó a Brasil, comunicó que mantuvo reuniones con el secretario de Defensa Agropecuaria de la República Federativa de Brasil, José Guilherme Tollstadius Leal, y que la misma estuvo encabezada, además de Negri, por el director nacional de Protección Vegetal, Diego Quiroga y el director de Certificación Fitosanitaria, Martín Delucis.
“En el acuerdo, que nos permite volver al estatus anterior, fueron aceptadas las propuestas de la Argentina que consisten en agudizar para la presente campaña los monitoreos y controles en la producción de ambas frutas”, señaló Negri.