El presidente Alberto Fernández anunció este jueves por la noche que a partir de las cero horas del viernes, y hasta la medianoche del próximo 31 de marzo, el país vivirá en situación de emergencia sanitaria total, al decretarse que todos los habitantes “deberán someterse al aislamiento social preventivo obligatorio”.
“A partir de este momento nadie puede moverse, todos deben quedarse quietos”, enfatizó el presidente luego de mantener una extensa reunión con todos los gobernadores. De todos modos, también aclaró que habrá excepciones a esta férrea cuarentena total. Mencionó a los que producen alimentos, aunque sin dar precisiones. Habrá que esperar el DNU (decreto de necesidad y urgencia) que se publicará en las próximas horas.
Fernández dijo que para frenar el contagio del Coronavirus en el país en los últimos días se tomaron más de 30 medidas, como cerrar las escuelas, pero que no fueron suficientes. Por eso esta medida tan drástica de disponer un encierro forzoso de la mayoría de los argentinos en sus casas.
“Esta medida la hemos dictado ahora tratando de que los efectos sobre la economía sean los menos dañinos posibles”, indicó Alberto tratando de suavizar la mala noticia. En ese sentido recordó que este fin de semana es largo, pero el lunes es feriado. Y adelantó que el martes 31 de marzo también será considerado feriado (por el adelantamiento de la conmemoración del 2 de abril) y que el lunes 30 de marzo será considerado “feriado puente”. De todos modos, serán doce días completos de cuarentena.
El presidente dijo lo que muchos productores necesitaban escuchar, pues están frente a decenas de tareas que no pueden suspenderse o psoponerse hasta el final de la cuarentena. Hay decenas de miles de explotaciones rurales que no pueden parar, sobre todo sabiendo que están por hacer las cosechas de soja, de maíz y de varias economías regionales.
Las “excepciones” mencionadas por el Presidente incluyen a los funcionarios políticos, a los que trabajan en la sanidad, en las fuerzas de seguridad y en las fuerzas armadas y “en una serie de actividades que el decreto especifica, fundamentalmente los que trabajan en la producción de alimentos, de fármacos, y algunas otras actividades como el petróleo y las refinerías”.
Un borrador del decreto que circulaba en redes sociales confirmaba que “quedan exceptuadas del cumplimiento del aislamiento social, preventivo y obligatorio y de la prohibición de circular” las personas afectadas a… Y en el punto 13recetaba: ” Actividades vinculadas con la producción, distribución y comercialización agropecuaria y de pesca”.
¡Y para la gente común que trabaja de otras cosa? “Obviamente hay situaciones permitidas. Todas las personas deberán permanecer en sus hogares, pero podrán salir para hacer lo necesario, van a seguir teniendo los negocios de cercanía abiertos”, aclaró Fernández. De todos modos advirtió: “Entiéndase bien que la Prefectura, la Gendarmería, la Policía Federal y las provinciales estarán controlando quien circula en las calles, y quien no pueda explicar se verá sometido a las sanciones que el código penal prevé”, explicitó.
El presidente aclaró que sabe que “la economía sin duda se va a ralentizar, vamos a tener menos actividad económica, menor recaudación y problemas fiacales que vamos a tener que atender”. De todos modos prometió que se anunciarán nuevas medidas de socorro, especialmente para los monotributistas. Todas estas situaciones serán contempladas por un Gabinete Federal, que conformó a partir de ahora junto con las provincias.