Pocos días atrás, mientras trabajaba en la otra punta de su campo, Gabriel de Raedemaeker, vicepresidente de CRA, fue informado por un vecino que se le estaba incendiando parte de sus cultivos. El fuego fue frenado por la rápida reacción de los bomberos, la policía y los colegas que lo socorrieron. Así se evitó un daño mayor, aunque las pérdidas no fueron menores.
El productor tiene su establecimiento en Oliva, en el sur de Córdoba. Allí el martes 26 de mayo “pasadas las 14.30 horas aproximadamente alguien llegó hasta el campo, cruzó alambrado, caminó en el lote del maíz, hizo un montoncito y prendió fuego. Esos hechos ya fueron peritados”, explico el dirigente rural a Bichos de Campo.
Escuchá la entrevista con Gabriel de Raedemaeker:
En definitiva, el productor cordobés perdió 25 hectáreas de maíz que todavía estaban sin trillar y 5 hectáreas de trigo ya nacido. El maíz estaba pronto a ser cosechado y en esa condición es alcohol en estado puro.
“Esas 25 hectáreas de maíz equivalen a 300 mil kilos de alimento, a 300 mil paquetes de polenta que no van a estar”, explico De Raedemaeker.
Si se mide el daño económico y si se piensa en que se perdieron 30 toneladas de cereal -en el caso del maíz tiene un valor promedio de 8.500 pesos la tonelada- al ruralista cordobés este suceso le costará unos 250 mil pesos, a los que hay que sumar lo que gastó en insumos, en la siembra y el daño al suelo. Por supuesto en el campo nadie asegura sus cultivos contra el riesgo de un incendio. Y mucho menos se sospecha que estos hechos pueden llegar a ser “intencionales”.
Pero el económico no es el único ni el mayor daño a criterio del dirigente de CRA: “No se puede medir solo el daño económico sino también el moral y por el mensaje que se le pasa a la sociedad”.
Denuncian que quemaron “intencionalmente” el campo del vicepresidente de CRA
Lo que Gabriel está esperando, ahora que la justicia tomó cartas en el asunto, es “dilucidar quién puede tener semejante actitud de violencia, porque esto puede llevar a una crisis de violencia fuerte, genera más inseguridad y una sensación de impunidad que preocupa”.
Luego el vicepresidente de CRA explicó que “sin pretender dramatizar, tengo problemas familiares por esta situación, la familia queda intranquila. Además, para poder ir de mi casa al campo tuve que tramitar una habilitación, mostrarla cuando entro al pueblo, me toman la temperatura, hay todo un protocolo de seguridad. Pero alguien que pudo violarlo, prendió fuego en el campo, volvió a su casa y nadie lo vio”.
Teniendo en cuenta las continuas críticas de la entidad que lidera Jorge Chemes y de la que es el segundo al mando y las características del hecho se podría sospechar que no se trató de una simple travesura.
“Hay audios reivindicando la situación, cosas que no caben en una cabeza normal, sana. Hay muchas casualidades que nos hacen pensar en una causalidad, porque desde CRA venimos denunciando estos hechos violentos, hasta incluso el asesinato de un productor en Misiones. Ahora me tocó a mí, pero hubo muchos casos de roturas de silosbolsas o robo de ganado, hasta incluso motorizados por personajes mediáticos que mandaron a quemar campos de soja. Son pronunciamientos sumamente inconscientes de personas que no miden las consecuencias de las palabras que pronuncian”, reflexionó.
Tras el hecho, muchos se solidarizaron con la situación y enseguida se conocieron los comunicados de prensa por caso de las otras entidades de la Mesa de Enlace. Pero también se manifestó el ministro de Agricultura Luis Basterra.
De todos modos, De Raedemaeker cree que no es suficiente: “Más allá del llamado de Basterra, a quien agradezco su actitud y preocupación, no hemos visto un pronunciamiento del Gobierno por todos los actos que ha venido ocurriendo que violaron la propiedad privada y la tranquilidad del campo. No hay mensaje condenando la situación y eso puede dar pie a que la gente lo siga haciendo. Uno olfatea que hay algo más”.
El último Bichos de Campo estuvo dedicado al tema dela inseguridad que se vive en el medio rural:
En el último tramo de la entrevista le preguntamos al dirigente rural por las últimas medidas cambiarias que tomó el Banco Central y sobre esto dijo: “Veníamos con una situación muy crítica, mucho antes del Covid-19 y a esto se agregó la caída de demanda y la inestabilidad cambiaria, con la imposibilidad que tendrán los importadores de hacerse de dólares porque vendemos los productos al oficial menos derechos de exportación. Vamos a tener que acercarnos al dólar bolsa o contado con liquidación para hacernos de los insumos y eso le pega al poder de compra de nuestros productos”, evaluó.
“El gobierno dijo que eso no iba a ocurrir, pero la situación se está planteando y se va a agravar en el futuro, La salida no es la presión impositiva sino por incremento de la recaudación vía más producción y para eso hay que generar un clima de negocios y económico favorable y no seguir castigando al productor”, reclamó el dirigente.