La posición del secretario de Agricultura de Javier Milei, el ex decano de la Facultad de Agronomía Fernando Vilella, nunca fue de tanta debilidad como en las últimas horas. La mejor prueba de ellos es que en las últimas horas hasta un tuitero libertario, que forma parte de los equipos de comunicación digital apañados por el presidente, lo retó en público y amenazó con despedirlo del gobierno en el que debutó apenas cien días atrás.
Lo realmente lastimoso es que el funcionario, que depende orgánicamente del ministro de Economía, Luis Caputo, pidió disculpas por un supuesto error, en vez de mandar a la mierda a quien lo reprendía, dando cuerpo a las versiones de que en el gobierno de Milei tienen más peso y poder ciertos personajes de la redes sociales que los propios secretarios de Estado.
¿Qué sucedió? Desde su cuenta personal, el secretario Vilella le puso me gusta a un tuit del jefe de la UCR y senador Martín Lousteau, referido a la falta de políticas públicas frente a la crisis del dengue. Frente a este hecho, voluntario o no, el tuitero libertario apodado Gordo Dan actuó como comisario político del gobierno y le escribió al funcionario: “A partir de mañana no formás más parte del Gobierno”.
Todo quedaría en una anécdota sin sentido, de las tantas chicanas que se dicen en las redes sociales, si no fuera porque el secretario de Agricultura eliminó su “like” al mensaje de Lousteau y pidió disculpas a quien lo había amenazado con su despido: “Obviamente fue un error que ya enmendé. Jamás lo haría con alguien con quien disiento en casi todo”, dijo en referencia al dirigente radical y tratando de complacer al comisario digital de La Libertad Avanza.
El llamado Gordo Dan, cuyo nombre real es Daniel Parisini, es un reconocido militante y tuitero libertario que forma parte de los equipos de comunicación digital de Milei. Por ahora su amenaza de despedir a Vilella no se concretó, pero en el sector este insignificante cruce que nada tiene que ver con la política pública para el agro fue la comidilla de toda la jornada.
Todos ven al secretario Vilella sumamente débil, al margen de las verdaderas discusiones que preocupan al agro.
No fue solo por este episodio que se construyó esta imagen sino que esta es la frutilla del postre de una saga que comenzó incluso antes de que Milei asumiera la conducción de la República. De hecho, Vilella no pertenecía a sus filas políticas, sino que -aprovechando su prestigio académico- fue convocado por un grupo empresario para redactar la propuesta agropecuaria de la que el político libertario carecía por completo.
Así las cosas, fue confirmado en Agricultura por el jefe de Gabinete, Nicolás Posse, incluso antes de que se conociera que Luis Caputo iba a ocupar el Ministerio de Economía. Por tanto, tampoco forma parte de ese equipo.
De hecho, una de las primeras decisiones de Caputo fue cercenar violentamente el margen de acción del experto en bioeconomía, al quietar por primera vez en la historia la posibilidad de que el Secretario de Agricultura maneje su propio presupuesto y la contratación de personal. Lo que decidió Economía es subordinar el área de Administración de esa cartera a Juan Pazo, el secretario de Desarrollo Productivo e Industria, un hombre del círculo del ministro de Economía.
La subordinación no solo es económica sino también política. Quedó claro cuando Pazo tomó en persona las negociaciones para desactivar una protesta de los yerbateros del INYM. Vilella había nombrado allí unos días antes a un agrónomo ligado a Ramón Puerta, que el resto de los eslabones de la cadena rechazaba. Economía obligó a Agricultura a dar marcha atrás con ese nombramiento y el cargo todavía permanece vacante.
Con el sector pesquero hay otra tormenta que muestra el escaso poder de juego que tiene Vilella, a cargo de ese área como secretario de Agricultura, Ganadería y Pesca. La saga está sucediendo ahora, cuando el buque factoría Tai An comenzó a descagar en el puerto de Ushuaia las casi 150 toneladas de merluza negra que había capturado sin tener permisos. Cuando hace unos días fue revelado el caso, las autoridades de Pesca primero ordenaron el regreso anticipado a puerto, pero un llamado desde Cancillería ordenó todo lo contrario. Por este caso ya renunciaron varios altos funcionarios. Lo que queda por saber es si Vilella podrá aplicar las multas que corresponden por la violación de las leyes vigentes, o si continuará aceptando que la empresa pesquera goza de una protección especial del gobierno.
La frágil situación política del funcionario se expresa en otras situaciones insólitas, como que debió dar de baja la cuenta que había creado desde la pretendida Secretaría de Bioeconomía de la Nación (todavía no lleva ese nombre, pues nunca salió publiciada la nueva estructura como parte del nuevo Ministerio de Economía), ante las críticas que entre militantes libertarios cosechó su visita a la primera empresa productora de insectos para desarrollar alimentos para animales, hace dos días en Balcarse.
A partir de los comentarios negativos que tuvo este tuit, la Secretaría de Bioeconomía (@bioeconomiarg) dio de baja la cuenta. @TuitsBorrados
Este era el link del tuit: pic.twitter.com/rxUaBvR8W7
— Raúl Benetti 🇦🇷 💙 (@RalBenetti) March 20, 2024
Ya se que estan echando gente para ahorrar en todos lados, pero contraten un corrector de ocasion para la redaccion. Entre otras pequeñeces, “Balcarse” se escribe “Balcarce” desde el siglo XVIII mas o menos..
Ademas…
La Politica Online. 20/03/24.
Renunció el funcionario de Cancillería que quiso favorecer la pesca ilegal y ahora Mondino dice que no es su sobrino
Pablo Ferrara presentó su renuncia tras confirmarse que quiso beneficiar a un empresario chino para pescar ilegalmente merluza negra. “Es un sobrino del corazón”, explicaron en el entorno de Diana Mondino.
https://www.lapoliticaonline.com/politica/tras-el-escandalo-de-la-pesca-legal-el-sobrino-de-mondino-presento-su-renuncia/