Las autoridades del Senasa extendieron hasta el 31 de agosto de 2023 la autorización de uso de Cipermetrina, Deltametrina, Lambdacialotrina y Diflubenzuron para el control de la langosta sudamericana y la tucura quebrachera en todo el territorio argentino.
El permiso de uso excepcional de esos insecticidas, que se había implementado a comienzos de 2018, se viene prorrogando desde entonces ante la aparición de focos poblacionales en Paraguay y el norte argentinos que, en caso de prosperar para transformarse en mangas, pueden generar daños enormes a cultivos agrícolas.
La medida –publicada hoy en el Boletín Oficial– sin embargo no habilitó más el uso de Fipronil, dado que en agosto pasado se dispuso que el mismo será retirado del mercado argentino hacia fines de 2022 porque presenta riesgo para las poblaciones de abejas.
También se prorrogó hasta el 31 de agosto de 2023 el uso de Cipermetrina, Deltametrina y Lambdacialotrina y de cebo en base a Dimetoato para el control de la plaga tucura sapo en todo el territorio argentino.
En los fundamentos de la medida se indica que se detectaron brotes de tucura sapo en las provincias de Chubut, Río Negro y Santa Cruz que ocasionaron daños en cultivos hortícolas, pasturas y pastizales naturales, así como en estepa y mallines.