Un informe de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) destacó que el consumo de pollo en los primeros ocho meses del año se ubicó en niveles récord, dando la pauta de que en medio de la crisis económica que vive la Argentina ese tipo de carne se convirtió en una opción competitiva para las familias que intentan mantener las proteínas animales en sus dietas.
Eso sí, la ampliación del consumo de carne aviar no está siendo aprovechado al 100% por la industria avícola local sino sobre y todo por su competidora de Brasil, donde se encuentran los mayores exportadores de carne de pollo en el mundo. De hecho, las importaciones desde ese país están haciéndose notar en el mercado local, y también alcanzaron niveles récord en agosto pasado.
Vamos a los datos duros que plantea el informe de la Bolsa, basado en datos oficiales: Entre enero y agosto, el consumo interno ascendió a 1,43 millones de toneladas, lo que representa un aumento del 2% interanual. Esto son unas 30 mil toneladas adicionales respecto de igual lapso de 2024.
“Este es el registro más elevado en la serie de la Secretaría de Agricultura (Sagyp) que inicia en el año 2016. Es decir, el consumo de pollo en los ocho primeros meses del año es el más elevado en, al menos, los últimos 10 años”, destacó el informe.
¿Cuánto de esa mayor demanda de pollo pudo ser cubierta con producción local? La oferta de pollo argentino también se mantiene en los niveles más elevados de la serie de diez años. Entre enero y agosto, se produjeron 1,5 millones de toneladas de carne aviar, también un 0,5% por encima del año previo. “El nivel de producción es prácticamente idéntico al de 2022, que fue el récord histórico”, destacó la BCR.
Sin embargo, el mayor consumo lo está cubriendo la industria avícola brasileña. De hecho, “se destaca el fuerte crecimiento de las importaciones de carne aviar” desde el vecino país. “El mes de agosto de 2025 fue un récord mensual de importaciones, tanto en volumen (4.360 toneladas) como en valor (11,6 millones de dólares)”, subrayó el informe.
Bien puede decirse que el crecimiento de la demanda interna de este tipo de carne se cubrió con pechugas que están llegando desde el país vecino. En el acumulado enero-agosto se registran importaciones de carne de pollo por 44.000 toneladas, el máximo nivel registrado para dicho período. El crecimiento interanual llega a ser del 680%.
“Brasil es el primer exportador mundial de carne aviar, y el tercer mayor productor del planeta. En el año 2025, de acuerdo con el USDA, su producción ascendería a 15,2 millones de toneladas y sus exportaciones totales a 5,1 millones de toneladas; ambos récords históricos para dicho país”, indicó la BCR. Es obvio que la Argentina, con un dólar atrasado además, les permite colocar una pequeña parte de ese enorme excedente.
Aunque la producción argentina sigue siendo suficiente para cubrir la demanda interna, las exportaciones también juegan. En lo que va de 2025, vienen creciendo por segundo año consecutivo luego de tocar un mínimo histórico en 2023, cuando se habían interrumpido los despachos a China y Chile por casos de Influenza Aviar.
Con esos mercados ya recuperados, entre enero y agosto de 2025 se registraron exportaciones por 112.000 toneladas de carne avícola, por un valor de 155 millones de dólares.
Contrastadas contra las importaciones, la balanza comercial de la actividad avícola “viene manifestando un deterioro”, ya que el superávit de 110 millones de dólares en realidad “refleja una caída del 20% interanual, y del 37% en comparación con el promedio de los últimos cinco años”.