En el año 2020 la cadena láctea argentina destruyó riqueza al perder 5736 millones de pesos a pesar de que la producción nacional de leche creció un 7,3% respecto de 2019.
Durante todo el año pasado las Pymes lácteos perdieron dinero, mientras que las grandes compañías –en promedio– lograron obtener cierta rentabilidad durante algunos meses, aunque con contrastes marcados según el perfil de cada firma.
Aquellas empresas con una matriz comercial más enfocada en el mercado interno perdieron grandes cantidades de dinero debido a la política de precios máximos (“Precios Cuidados”) implementada por el gobierno nacional en un contexto de aceleración inflacionaria, mientras que los operadores con negocios en el mercado externo pudieron lograr una mejor performance.
En cuanto al sector primario –según indica el último informe realizado por el Instituto Argentino de Profesores Universitarios de Costos (Iapuco) en conjunto con el INTA– el primer semestre de 2020 fue favorable para la actividad, pero en el segundo los precios recibidos no llegaron a cubrir los costos en muchos casos.
Entre los tamberos también se registraron situaciones disímiles: mientras que las empresas lecheras presentes en las cuencas cordobesas y santafesinas comenzaron a perder dinero de manera acelerada desde mediados de año, las empresas bonaerenses –con mayor escala productiva– tuvieron en general un año muy destacado y recién en los últimos meses de 2020 los ingresos comenzaron a equipararse a los costos.
En 2020 se procesaron en promedio 881,2 millones de litros por mes con un tenor graso medio del 3,58% y un tenor proteico del 3,35%.
Mala noticia para tamberos: Se agregó un producto lácteo más a la lista de “Precios Cuidados”