El gobierno argentino presentó el resumen del “Plan Nacional de Adaptación y Mitigación al Cambio Climático al 2030”, el cual sintetiza las políticas del país orientadas a limitar las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) en diferentes sectores de la economía.
El propósito de tales acciones –anunciadas ayer en un acto en el cual no participó ningún funcionario del área de Agricultura– es no exceder una emisión neta de 349 millones de toneladas de dióxido de carbono equivalente (MtCO2e) para el año 2030.
El resumen presentado contiene algunas particularidades que merecen ser explicadas, las cuales seguramente están contenidas en el documento final que, extrañamente, no fue publicado por el gobierno.
Una de las líneas estratégicas contenidas en el resumen del documento señala que se pretende aumentar la superficie destinada a conservación. Se trata de un objetivo que está en línea con el fallido proyecto de humedales que pretende, justamente, quitar de producción a vastas áreas de uso agropecuario.
La cuestión es que Argentina, en el marco de la Ley de Bosques (Nº 26.331), ya retiró de producción a 10,8 millones de hectáreas al considerarlas como zonas de alto valor de conservación (categoría I), mientras que otras 32,2 millones (categoría II) solamente pueden ponerse en producción con una autorización de las autoridades ambientales de cada provincia.
Sin embargo, según el “Plan Nacional de Adaptación y Mitigación al Cambio Climático al 2030”, parece que eso no es suficiente y que, por lo tanto, es necesario neutralizar nuevas zonas productivas para destinarlas a conservación.
Otro aspecto llamativo del resumen del documento final es que menciona la necesidad de relocalizar a la población, lo que introduce un aspecto mucho más inquietante.
El hecho de que el gobierno decidiera ocultar el documento completo, lejos de aquietar las sospechas, las incrementa, dado que aseverar que es necesario quitar nuevas zonas de producción y relocalizar a la población son cuestiones que no pueden pasar desapercibidas en una nación que sustenta su economía en la producción agropecuaria.
Está bien. Es lo que hay que hacer. Aumentar la superficie de las áreas destinadas a conservación. Si es verdad es una excelente noticia. Ojalá se cumpla y no sea sólo un anuncio.