En la provincia de Santa Cruz no existe el cargo de Ministro de Agricultura o Ganadería sino que ese rol lo cumple históricamente el presidente del Consejo Agrario Provincial (CAP). Durante muchos años, cuando el kirchnerismo dominó toda la escena política en esa provincia patagónica, ese puesto recayó en el conocido Javier de Urquiza, que llegó a ser secretario de Agricultura de la Nación. Pero ahora hay aires de renovación y el nuevo y joven gobernador Claudio Vidal designó en ese puesto a un productor local respetado por sus pares, llamado Adrián Suárez.
El nuevo presidente del CAP participó días atrás de una reunión regional que Bichos de Campo cubrió en el marco de la Exposición Rural de Comodoro Rivadavia. Allí se discutió con la crisis ovina como telón de fondo. Suárez explicó que se trató del “segundo encuentro entre el sector público y el privado. Yo estuve en el primero como productor y ahora estoy como funcionario de la provincia de Santa Cruz”. Y remarcó: “Somos una provincia netamente ovina, tenemos algo de bovinos, pero muy poco, y tenemos el principal polo cárnico del país de frigoríficos ovinos. También somos la segunda provincia productora de lana después de Chubut”.
-¿Se toman en serio la crisis ovina? Porque por ahora el final de esta película es que hay cada vez menos productores en la Patagonia austral.
-Estamos empezando una nueva gestión. Yo tengo un mes y medio en el cargo, el gobernador también, pero es un gobernador que habla de de producción, de volver a la cultura del trabajo y apostar fuertemente a la producción. Como vos bien decís, lamentablemente el final nos está diciendo que hay menos productores, que hay menos producción.
-Se habla de un importante despoblamiento de campos en la meseta. ¿Cuando llegaste al gobierno, te encontraste con estadísticas sobre este fenómeno?
-Sabemos más desde el sector al que yo pertenezco, que es la Federación de Instituciones Agropecuarias de Santa Cruz que del Gobierno. La verdad es que hemos recibido un gobierno que no tenía prácticamente números, no tenía estadísticas. Nos lo encontramos mucho más devastado de lo que pensamos, en todas las áreas. Pero bueno, es lo que nos toca y estamos dispuestos a trabajar para salir adelante.
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Suárez no esconde el crudo diagnóstico sobre la situación, “Hay menos productores cada año y eso nos preocupa realmente. Tenemos problemáticas similares a los de la Provincia del Chubut y a otras partes de la Patagonia. La idea es trabajar muy fuerte en bloque”, indicó el patagónico.
Una de las líneas de acción más claras que comparten ambas provincias es poner en marcha, luego de varios ensayos, las líneas de explotación racional del guanaco, una especia silvestre que ha crecido tanto que ya compite por el recursos agua y pasto con los ovinos. “Nosotros creemos que tiene que ser un gran recurso, pero tenemos que empezar a ponernos las pilas fuertemente en eso, porque se nos siguen quedando sin productores el campo”, indicó el funcionario.
-Este es un tema que no se entiende del todo en Buenos Aires. Allí dicen: ¿Cuál puede ser el problema con el guanaco? No entiende que haya un problema.
-El problema. al que le estamos tratando de buscar la solución, es que han sobrecargado nuestros campos. Un guanaco equivale a una oveja y media , o dos. Y bueno, tenemos casi 2 millones y medio de guanaco. O sea que…
-Tenés el equivalente a 5 millones de ovejas comiendo.
-Exactamente. Entonces vamos por un negocio.
Actualmente el stock de ganado ovino provincial se estima en 2.300.000 cabezas con razas predominantes Corriedale y Merino. Sabiendo eso, los guanacos se han transformado en el principal dolor de cabeza de los productores, en especial los más chicos y de zonas menos aptas, que no tiene recursos para alimentar a todos. Por eso los campos ovejeros van retrocediendo y despoblándose.
“Ya tenemos una gran parte de la provincia despoblada de ovejas. Pero bueno, se está produciendo un ecocidio del suelo. Eso es lo que más nos preocupa, porque nos estamos quedando sin productores, pero además nos estamos quedando sin suelo”, advirtió Suárez.
-¿Porque entre la carga de guanacos y la de ovejas se produce un sobrepastoreo?
–Fundamentalmente la carga de guanacos, es muchísima. Teníamos hace 20 años atrás unos 600 o 700.000 guanacos y ahora son 2,5 millones. Al revés, en los años 40 llegamos a tener 7 u 8 millones de ovinos y estamos en 2 millones. O sea que la carga de ovinos ha disminuido notoriamente. Pero bueno, por ahí lo miran como un lindo animal (al guanaco).
-¿Y se puede hacer un aprovechamiento lógico de esa población de guanacos?
-Tiene que haber un aprovechamiento económico. Las proteínas de la carne son importantes. Hay que hacer un aprovechamiento de la fibra, que es la segunda fibra de más valor en el mundo después de la vicuña pero que está muy poco desarrollada. Pero ya tenemos gente que está interesada en el tema y después la carne.
-¿Y cuál será la estrategia? ¿Vincularse con otras provincias que tiene el mismo problema, para generar un bloque patagónico? Me imagino que hay que ir a tocar puertas a la Nación pensando en un plan de largo plazo.
-Sí, exactamente. No es la misma realidad que tienen estas provincias con, por decirte algo, Mendoza o el norte del país, donde hay muy pocos guanacos y tienen que cuidarlos como oro. Nosotros tenemos otra realidad muy distinta a nosotros. Como te decía recién, tenemos 2,5 millones y debemos aplicar otras metodologías para que no nos quedemos sin suelo y para que podamos coexistir con la oveja también. La realidad de Santa Cruz fue siempre ovejera. Nosotros estamos haciendo ocupación territorial con eso. Yo mismo soy tercera generación de productores y la verdad es que vemos con mucha preocupación que cada vez quedan menos productores.
-Entonces el control racional del guanaco en el sur debería ser una casa nacional… ¿Cómo la ven ustedes?
-Con estos nuevos cambios en Nación creemos que tendremos más apoyo para ver este recurso, el guanaco. Nosotros no queremos matarlo por matar, sino queremos que se se aproveche la fibra y la carne, pero que se conserve. Tenemos parques nacionales, tenemos muchas reservas para eso.
-La carne vacuna está cada vez más cara. Tenemos mucha gente por debajo de la línea de pobreza. ¿Podría ser una opción la carne de guanaco para facilitar el acceso a proteínas animales a la población más vulnerable?
-Coincidimos totalmente. Nosotros dentro de la provincia somos autoridad de aplicación. Podemos hacer faenas en distintas épocas; lo tenemos marcado por nuestro plan de manejo. Queremos avanzar hacia Nación para poder sacarlo de la provincia, la carne y hasta en un futuro también ver como una posibilidad de exportación.
-¿Pero ahora no tiene tránsito federal?
-Por ahora no tenemos tránsito federal. Tenemos buena demanda turística de la carne dentro de la provincia. También es verdad que no hay una cultura de la gente de mi provincia de comer carne de guanaco, pero el turismo sí lo está desarrollando, fundamentalmente lo que es El Calafate. Vos dijiste muy claro que existe una gran necesidad de tener precios más baratos para gente de escasos recursos. Hay que conversarlo muy fuerte con el Gobierno nacional, adecuar el Plan Nacional de manejo del Guanaco y ver cómo podemos llegar a las distintas zonas del país, donde es una necesidad la proteína, que es la carne.
-¿La carne de guanaco es de buena calidad y fácilmente comestible?
-Totalmente. Es una carne más magra que la de vaca, por ejemplo. Así que estamos encargando, a través del INTA, un estudio que nos de todos los porcentajes que tiene de distintos componentes esa carne, para poder hacer un trabajo serio. Así que vamos por por ese camino.
Lo que faltaba. Un ignorante de ministro.
Qué hijos de re mil bruta!
Lo conoce? Porque yo sí, de antes de ser presidente del Consejo Agrario (no es ministerio y no tiene ministro) , no es ningún ignorante, es un productor rural santacruceño muy respetuoso y respetado. Conoce ud algún campo en la Patagonia?
Si esta gente es “respetada” la Patagonia está condenada. Alguien que “conoce” no puede pensar ni decir las barbaridades que se publican en esta nota.
. Cortando el acceso al agua en las bebidas y molinos el guanaco no se queda en el campo.