Aunque ya no se circunscribe únicamente al litoral, la problemática productiva que generan especies invasoras como el jabalí y el ciervo axis es en esa región especialmente relevante. Tanto así que las autoridades locales definieron cambios en la normativa que habilita su caza, incorporando no solo la “caza de control” sino también quitando el tope máximo de cabezas.
La situación fue reconocida por el propio ministro de Producción, Claudio Anselmo, que caracterizó al problema como “complejo”, y que aseguró que es clave dar con una articulación entre el Estado y el sector privado.
“El control en cada campo va a depender de lo que haga el productor. El productor no lo tenía en cuenta hasta hace unos años atrás”, señaló el funcionario en conversación con Bichos de Campo.
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“Antes el único sistema de control que había era el coto de caza. Hoy hay diferentes estrategias como el uso de jaulas, de cebos. Hay que entender que son temas que están complicando hasta a Estados Unidos en su zona productora del cinturón maicero”, dijo a continuación.
Es en este marco que el gobierno local decidió avanzar con la financiación para la habilitación de una planta de faena y frigorífico en Sauce, con el objetivo de asegurar un procesamiento controlado de estos animales silvestres, en función de las normas sanitarias dispuestas.
“Hay que tener en cuenta que en los cerdos está el riesgo de triquinosis e hidatidosis. Pero con esa carne se podrían abastecer a las industrias para que hagan subproductos. También hay una propuesta para hacer una planta en Esquina, y la municipalidad de Curuzú Cuatiá está yendo en la misma línea para hacer una pequeña planta de faena móvil, que pueda ir a los distintos campos donde se presenta el problema”, indicó Anselmo.
A esto sumó el interés de las autoridades para introducir jaulas similares a las empleadas en Australia y Estados Unidos, que faciliten el control a escala en los campos.
-¿Considerás que la presencia de estos predadores afecta los planes de la provincia de engordar a sus propios novillos, porque afectan también la incipiente producción local de maíz?– le preguntamos.
-Genera complicaciones porque hay que atender un problema más, como lo es controlar a esta especie. Pero creo que vamos en el buen camino. No va a ser sencillo, es un tema complejo, pero se está trabajando en conjunto con la Asociación de Sociedades Rurales de Corrientes, enfocándonos en los lugares más complicados, que son al sur de la provincia.