El gobierno provincial, a través del Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social, dictó la conciliación obligatoria en el conflicto laboral entre Unión Obrera de la Construcción (Uocra) y las compañías agroindustriales.
Al respecto, el ministro de Trabajo, Empleo y Seguridad Social, Juan Manuel Pusineri, indicó, por medio de un comunicado, “que se van a usar todas las herramientas disponibles a fin de buscar acuerdos a través del diálogo dejando en suspenso las medidas adoptadas o que tengan previsto llevar adelante las partes”. El funcionario confirmó que mañana jueves 8 de julio se realizará la primera audiencia entre las partes.
Integrantes de la delegación San Lorenzo de la Uocra impidieron durante toda la jornada laboral de hoy miércoles el acceso de los trabajadores a las terminales portuarias y fábricas aceiteras ubicadas en el Gran Rosario en reclamo de mejoras salariales.
Con carteles y neumáticos quemados, los gremialistas realizaron piquetes en los accesos de LDC (Timbués), Asociación de Cooperativas Argentinas (Timbués), Molinos Agro (San Lorenzo), Bunge (San Martín), Cofco (San Martín y Timbués), Terminal 6 (San Martín), Cargill (Quebracho), Renova (Timbués) y Aceitera General Deheza (Timbués).
La imprevista protesta provocó la paralización de la mayor parte de las exportaciones agroindustriales en pleno período de cosecha gruesa, algo que tiene incidencia directa en la economía argentina, pues se trata de la principal actividad generadora de divisas en la actual coyuntura.
Por otra parte, los bloqueos generaron un “infierno logístico” en el Gran Rosario, con filas de camiones extendiéndose por decenas de kilómetros, algo que, además de entorpecer la dinámica de la operatoria comercial, provoca gran malestar entre los choferes que tendrán que dormir en los vehículos durante esta noche para retomar el viaje mañana cuando se reinicien las actividades portuarias.