En los últimos días de diciembre, el mercado ganadero había dado muestras de mayor firmeza que se consolidaron en el arranque de este año, pese a que históricamente la primera quincena de enero es siempre un momento de bajas para los valores del ganado para faena.
Si se comparan los precios logrados el último viernes en Liniers, en la categoría novillos, la suba respecto de los valores de un mes atrás fue de 18%. En la primera semana del mes pasado, esa categoría promedió $42,50 contra los $50 que hizo en la última rueda comercial de esta semana. Y la misma suba porcentual tuvieron los lotes de hacienda liviana terminada a corral. En estos casos, cabe destacar que los de mejor condición orillaron los $60.
El alza que vienen experimentando los precios del ganado para faena tiene que ver con varias cuestiones: la acumulación de feriados por las fiestas y los problemas para sacar hacienda por la continuidad de lluvias que, en muchos casos, generaron inundaciones en zonas de la provincia de Buenos Aires, (Dolores, Lezama, por ejemplo) y también en varios departamentos de la provincia de Entre Ríos.
Esa supuesta faltante de hacienda que se combinó con un aumento estacional de la demanda por las fiestas, es lo que disparó los precios. Decimos “supuesto” porque en el acumulado del mes y según datos que difundió en estos días el analista Ignacio Iriarte (aún no están los oficiales), la faena del último mes de diciembre y pese a las dificultades que encontraron los operadores, fue de 1,15 millón de animales. Se trata de un volumen alto que implica un acumulado anual de más de 13 millones de cabezas.
Entre los operadores hay versiones encontradas al respecto de lo que pueda pasar. Algunos dicen que superado este momento, y en tanto se normalicen las ventas directas y las ofertas en Liniers, los precios tenderían a bajar, aunque no volverían a los niveles previos.
Otros creen que se trata de un adelantamiento del “efecto marzo”, es decir, de la suba que habitualmente se da en el cierre del verano por el faltante, sobretodo de ganado liviano, que tiene como destino el consumo doméstico.
En los próximos días se verá dónde está parada la demanda y si convalida las subas de las últimas semanas.