Hace algunos años se comercializó en nuestro país un producto que decía ser yerba mate, y que luego de muchos debates y controversias, se determinó que no podía ser considerado como tal. Solamente pueden gozar de ese privilegio aquellos paquetes de yerba mate que estén elaborados con Ilex Paraguariensis, la planta de la yerba mate.
Allá por 2007 salió al mercado “Unión Relax”, una yerba que estaba compuesta en un 70% de Ilex Dumosa, y 30% de Paraguariensis. Para aquella aventura se decidió aquel producto dado que la Ilex predominante posee un porcentaje mucho menor de cafeína, y por eso se completaba con la tradicional.
Los debates fueron álgidos en aquel momento por Misiones y Corrientes, donde se producen este tipo de productos, hasta que mediante una intervención del Instituto Nacional de la Yerba Mate, el INYM, se decidió que no podía venderse bajo la nomenclatura de yerba mate, ya que oficialmente la Dumosa no es tal cosa, como si la Paraguariensis.
Esta controversia quedó zanjada en aquel entonces, desapareció del mercado el producto a base de Dumosa, pero hoy en día pueden encontrarse en los mercados virtuales publicaciones de venta de Ilex Dumosa.
Más allá del marketing y el caso puntual de aquella yerba, fueron especialistas del INTA quienes luego de algunas expediciones a Brasil y Paraguay trajeron esta variedad vegetal, la investigaron, la probaron, y si bien hoy su historia está casi olvidada, Bichos de Campo trató de reconstruir su pasado y sus bondades agronómicas.
Mario Kryvenki es misionero, fanático del mate, y especialista en mejoramiento genético de la yerba mate en el INTA Cerro Azul, en aquella provincia mesopotámica. Como especialista, Mario recuerda aquella experiencia: “En el caso del trabajo que desarrolló esta empresa, fue con Ilex Dumosa, que es otra especie emparentada a la Ilex Paraguariensis. Hoy está habilitada también para consumo humano, pero el desarrollo de ella fue para producir un producto con bajo o nulo contenido de cafeína. Esa es la característica que tiene esta especie”.
Gracias a su reserva de germoplasma y a un convenio con una empresa privada, el INTA desarrolló y conserva 4 variedades de esta Ilex, que incluso podrían tener destino industrial: ILM 7/4 INTA, ILM 44/6 INTA, ILM 48/10 INTA, ILM 48/3 INTA.
Kryvenki asegura que gracias a las expediciones a la selva de colegas ya retirados en el INTA Cerro Azul, esa variedad se trajo de Brasil y Paraguay, pero también se encontró en Formosa, Corrientes y el norte de Uruguay. Según explica, las características agronómicas de la Dumosa son mejores que la Paraguariensis, tiene un rápido crecimiento, hace arbustos más profusos, y la industria probó en aquel entonces con la yerba Relax, dado que tiene entre 9 y 10 veces menos cafeína que su parienta. A su vez, la clonación parental de esta variedad resulta más sencilla.
Sobre la cosecha, Kryvenki dice que no llegaron a investigar todo su potencial, dado que para eso en cultivos de este tipo se necesitan muchos años. “Es una especie que no la hemos probado profundamente bajo cosecha mecánica, pero creemos que va a comportarse mejor que la Paraguariensis, porque naturalmente es una especie más arbustiva. Agronómicamente vemos que se va a adaptar mejor. El mejoramiento genético lo hacemos también pensando en rendimientos, y se estima que esta variedad tiene una mayor performance”, relata el especialista.
Actualmente los proyectos tanto de investigación como industriales están parados, la Ilex Dumosa se expende en mercados digitales, pero no puede ser considerada yerba mate, algo que sólo puede hacer la Ilex Paraguariensis, la prima que tiene acceso a todos los hogares de Argentina.
La yerba tradicional es ” Ilex paraguayensis ” , no sean BURROS.
Mayor rendimiento…ya dan asco, te quieren vender “yerba” de algo que no lo es. Eso sí, te la van a cobrar igual que si lo fuera. Las cosas como son.
Ya hicieron los mismos con los “bebibles” que lo venden como si fueran Yogurt y la “crema untable” que la venden como manteca. Chorros.