En muchos aspectos, los argentinos deberíamos aprender a copiar lo que está bien en vez de criticar todo, al punto de la demolición, solo porque lo hace otro.
Un buen ejemplo de copiar lo que está bien surgió ahora entre Córdoba y Santa Fe, dos de las principales provincias agrícolas de la Argentina. La primera de ellas, hace ya seis años, lanzó una iniciativa destinada a incentivar las Buenas Prácticas Agropecuarias (BPA), que distribuye aportes económicos entre los productores agropecuarios. No le cambian la vida a nadie, pero son un enorme reconocimiento y sobre todo dejan un mensaje claro de los estados a la sociedad respecto de lo que está bien y lo que está mal en materia productiva. Con tanto debate político infértil, eso es algo que no siempre queda claro en la órbita nacional.
En Santa Fe deben haber sentido bastante sana envidia de la iniciativa cordobesa, que además posiciona a esa provincia a la vanguardia en varios debates, como la necesidad de reforestar los campos o la utilización forzosa de recetas para la aplicación de fitosanitarios. Pero en vez de criticar, ahora han decidido replicar un programa parecido.
La buena noticia nos la dio María Eugenia Carrizo, la flamante secretaria de Agroalimentos de Santa Fe, quien reemplazó al fallecido Jorge Torelli en ese cargo clave dentro del Ministerio de la Producción de la provincia. Mirá la entrevista:
En este caso, el programa provincial de estímulos para que los productores hagan bien las cosas se llama Santa Fe Productiva y Sostenible. La página web institucional donde los chacareros pueden anotarse ya está disponible.
Carrizo explicó que, como en el caso cordobés, este programa apunta a “identificar a aquellos productores que cumplan con una serie de acciones, como el valor agregado, la sustentabilidad, la generación de trabajo, la participación de mujeres, etcétera. En definitiva se trata de dar un reconocimiento económico anual, a los productores e instituciones”.
-¿Será semejante entonces al Programa BPA de Córdoba?
-Este programa tiene un poco la misma metodología. Los productroes que cumplan con el cuidado de los recursos naturales, hagan rotaciones y buenas fertilizaciones, introduzcan sistemas forestales, que tengan mujeres trabajando, que hagan cosecha y almacenamiento de agua, cumplan normas de bienestar animal, hagan manejo de los desechos agropecuarios. Todas estas acciones van a ser contempladas y los productores van a obtener un reconocimiento de hasta 100 mil pesos por año. Queremos visitar a esos productores y que nos den testimonio de cómo el campo puede hacer bien las cosas.
-¿Habrá algún limite presupuestario o todos los productores que se inscriban serán evaluados?
-Nosotros hemos generado una plataforma llamada Santa Fe Productiva y Sostenible. Ahí se genera un usuario donde los productores van a ir cargando todos los comprobantes (de llos logros obtenidos). Allí los equipos técnicos del Ministerio van a validarlos junto a un conejo consultivo formado por varias entidades del sector. Tenemos asignados 50 millones de pesos para este programa, pero en caso de que superemos esa suma vamos a seguir dotando al programa de más recursos económicos. Es un programa que nosotros queremos tener. Siempre mirábamos al oeste de nuestra provincia y nos decíamos: ¿por qué los cordobeses lo tienen y nosotros no?
Este verano, en la fiesta nacional del trigo en Leones, el gobierno cordobés volvió a entregar diplomas y cheques a los productores de su programa de BPA que habían logrado cumplir con sus objetivos. En esa oportunidad, el ministro de Agricultura de la Nación, Julián Domínguez, elogió la iniciativa y habló de convertirla en un programa nacional.
Mientras esperamos eso, que todos los argentinos nos pongamos de acuerdo en torno a una acción que decididamente es la correcta, podemos alegrarnos de que dos de las principales provincias productivas ya la aplican.