El “manoseo” del “dólar soja” provocó un daño considerable en las operaciones de los futuros del poroto 2022/23 en el Matba Rofex. Pero no sucede lo mismo con los negocios correspondientes a la nueva cosecha.
La posición con mayor volumen de contratos abiertos en el mercado argentino de futuros agrícolas es precisamente la Soja Rosario Mayo 2024 (correspondiente a la soja de primera) con un volumen de 637.500 toneladas. Bastante más por detrás está el Maíz Rosario Diciembre 2023 con 525.400 toneladas.
Hasta el momento las operaciones realizadas con Soja Rosario Mayo 2024 superan las 1,91 millones de toneladas, lo que indica que existe una proporción importante de empresarios agropecuarios que considera oportuno comenzar a cubrir al menos una parte de la nueva cosecha de la oleaginosa.
En mayo pasado los valores de esa posición perforaron los 345 u$s/tonelada y no muestran señales de que puedan volver a superar esa barrera a pesar de las dificultades que está atravesando el inicio de la campaña sojera estadounidense.
La cuestión es que, con un Brasil incentivando la expansión del área agrícola y la incorporación de tecnología, otra nueva cosecha récord en el país vecino más una producción normal a buena en la Argentina sólo puede representar una cosa: un escenario claramente bajista más allá de lo que ocurra en el Medio Oeste de EE.UU.
La otra parte de la “película” es que la demanda global en general y china en particular viene mostrando una desaceleración importante en los últimos años.
El gobierno chino viene implementando hace años diferentes políticas orientadas a intentar reemplazar la harina de soja por otras alternativas que, si bien son menos eficientes, resultan mucho más económicas y, adicionalmente, aminoran la dependencia que tiene la nación asiática de los únicos tres proveedores mundiales del producto (Brasil, EE.UU. y Argentina).
En ese marco, si bien aún es necesario atravesar las “aduanas” climáticas de EE.UU. y luego de Sudamérica, sin mayores inconvenientes al respecto el mercado va camino a generar una mayor oferta con una demanda que no llegaría a crecer al mismo ritmo.