Gabriel Burgueño es palabras mayores si hablamos de plantas nativas. Él se encarga de diseñar y planificar espacios verdes y dejarlos a gusto del cliente, pero sobre todo, asesora y enseña sobre las bondades y beneficios de la convivencia entre plantas nativas y las que no lo son. Habla de un nuevo paradigma en el paisajismo: diversificación y combinación de tecnología con plantas nativas. Y lo aplica en ámbitos urbanos, como en terrazas o paredes verdes.
En este video que publicó De Raíz el especialista brinda un pantallazo de cómo se puede armar un jardín bajo estos parámetros y responde sobre qué especies combinar y por qué hacerlo, qué cosas son necesarias y qué tecnologías podemos utilizar para llevarlo a cabo.
Mirá el video:
Los techos verdes o jardines verticales son una tendencia que, al menos hace 15 años, se ve en los países europeos. En la Argentina, y sobre todo en las grandes ciudades, la planificación y aprovechamiento de espacios para transformarlos en saludables y llenos de oxígeno también es un hecho. Se ve este utilización bajo puentes o pasos peatonales en las avenidas, plazas rodeada de edificios, condominios privados, universidades, y hasta sobre el techo de restaurantes o estacionamientos.
Gabriel cuenta que al hablar de la terraza verde intenta desmitificar la dificultad. “Contar que es posible, que es fácil, que con muchas tecnologías diversas se puede implementar, incluso a cualquier escala; y que en ámbitos urbanos puede ser una solución cuando tenés abajo la vivienda, estacionamiento u otras construcciones. Es combinar la tecnología de la terraza con el mundo de las plantas nativas, para atraer otros bichos, otra fauna. Para revincularnos con esa naturaleza que la ciudad fue desplazando”, indicó.
Las especies nativas tienen una fuerte vinculación con la fauna, son austeras y son cultivos fáciles y sencillos. Gabriel resalta que actualmente hay un llamado a plantar cosas distintas, apuntando a “una diversidad que vale la pena”.
“Hay un paradigma de la mezcla, porque el jardín es un poco eso. Las aromáticas, las que comemos, la que nos gustan porque nos recuerdan lugares o momentos, y las nativas, que a lo mejor se vienen cultivando desde hace unos años”, definió.
Comentó además el diseñador que “no hace falta hacer todo o nada. Dependiendo lo que queremos tener o conseguir en nuestro espacio natural, por ejemplo que las mariposas se posen en nuestras flores, tenemos que sumar las especies que lo permitan y generen”.
La alianza con plantas no nativas puede significar obtener flores en otras época.s Y si hablamos de atraer colibríes, por ejemplo, el universo de Salvias como género los atrae, sea una especie de Europa o de América.
Algunas recomendaciones para pensar el diseño de un muro verde.
- El jardín vertical más elemental, austero y sustentable es si tenés suelo, colocar plantas que trepen, que se adhiera a la pared, o que tenga alguna ayuda con soporte, enrejado o triage, por ejemplo.
- Lo básico para pensar una pared verde es simplemente una planta trepadora que se pegue, o con un soporte. Puede ser un burucuyá, o una uña de gato, un jardín de Córdoba, plantas de enredaderas nativas o cultivadas pero que den además un atractivo de una flor, mariposa o colibrí.
- Cuando no hay disponibilidad de sustrato, se puede pensar en la posibilidad de utilizar tecnología de geotextil, de bolsillos, o pallet, entre otras.