El precio de la carne en febrero pasado alcanzó en promedio los 840 pesos por kilo. A partir de ese valor, y como hace cada seis meses, la FADA (Fundación Agropecuaria para el Desarrollo de Argentina) analizó la participación de cada sector en la conformación del precio final de ese alimento tan caro a los intereses de los argentinos. Resultó ser que el productor de cría, que genera los terneros, fue responsable del 28% de ese valor, y que un porcentaje similar se originó en los impuestos que pasan sobre esa cadena productiva.
“En la carne, más del 60% son costos y 28% impuestos”, afirmó Natalia Ariño, la economista que estuvo a cargo del estudio. Desglosando los números, en promedio durante febrero el ternero se vendió en 317,56 pesos por kilo de animal en pie, el novillo en 273,48 pesos, el kilo de carne al gancho en 490 pesos y la
carnicería comercializó el kilo de carne en 840 pesos.
Para mostrar la composición del precio de la carne a lo largo de la cadena, se aplican los rendimientos antes mencionados para expresar todo en “kilos de carne al mostrador”: Esto permitió calcular que en la cría, el precio del ternero representó 316,55 pesos por kilo de carne al mostrador. Para alcanzar este precio, el productor tuvo costos por 184,72 pesos, pagó impuestos por 83,10 pesos y tuvo una ganancia de 48,72 pesos por kilo de carne al mostrador.
Si a esto se le suma el IVA (10,5%) por 80 pesos, el precio final que pagó el consumidor en promedio fue de $840, siempre con datos a febrero.
FADA agregó que al analizar los costos de flete de toda la cadena, representa el 0,8% del precio final de la carne, es decir que por cada kilo que se compra en el comercio, se pagan 10,20 pesos en ese concepto.
Por otro lado, el costo de mano de obra en toda la cadena, representa el 10% del precio final, acumulado en gran parte en el sector comercial. Por cada kilo, el consumidor paga 84,50 pesos de salarios.
Los resultados del estudio de FADA, muestran un alto impacto de los impuestos en la composición del precio final. “De lo que pagamos por la carne, leche y pan, 1 de cada 4 pesos son impuestos. Es decir, los impuestos son un cuarto del precio final que pagamos los consumidores.
En la carne de vaca el 28% del precio final son los impuestos de la cadena. De esos impuestos, el 75% son nacionales, 19% provinciales y el 6% municipales. El impuesto a las ganancias y el IVA, son los de mayor participación, que en conjunto representan el 65% de los impuestos totales.
En el documento se registró además que en el precio promedio de la carne la cría representa el 28%, el feedlot 29%, el frigorífico 5%, la carnicería el 10%. En la etapa productiva, por otro lado, se calculó que el maíz representa 11% del precio del kilo de carne al mostrador.