La aviación agrícola es otro de los sectores en los que Brasil supera ampliamente a Argentina. Desde ya que eso responde a que allí hay muchas más hectáreas productivas por cubrir, incluso en zonas complejas, pero también se debe a que hay, desde hace ya varios años, un sector agropecuario mucho más aliviado que puede “darse el gusto” de invertir en tecnologías mucho más costosas.
Así y todo, en nuestro país el sector de la aeroaplicación acumula una larga tradición y casi 100 años de historia, con cientos de empresas familiares. Eso es justamente lo que le da la pauta a los vendedores de aviones agrícolas para confiar en que de la mano de la recuperación económica, estabilización “macro” y acceso al crédito llegará también una recuperación de las ventas.
Así lo señaló el brasileño Renmarca insignia de aeronaves dedicadas a pulverizar y combatir incendios a nivel mundial.ato Pires da Silva, que integra la firma Aeroglobo y comercializa en Argentina -con su red de distribuidores- los famosos Air Tractor, sin dudas la

Un modelo mediano de estos aviones, como el 502 B, con capacidad de carga de 500 galones -casi 1900 litros- cuesta alrededor de 1.350.000 dólares. Con esas cifras, puede parecer lejano, pero el vendedor señala que cumplir el sueño de ser un empresario aeroaplicador “no es difícil” porque, al igual que le sucede a un contratista rural, la maquinaria se financia y luego se amortiza en la diaria.
“Es una herramienta de trabajo que se paga muy fácil”, afirmó Pires da Silva que asegura que, si se le da el mantenimiento adecuado, puede funcionar durante 15 años sin tener un sólo problema grave.
En ese circuito están también interesados ellos como vendedores, porque, tal como se acostumbra en el sector de la maquinaria agrícola, se brinda servicio de posventa y, en este caso particular, hasta capacitaciones y formaciones adicionales.
Mirá la entrevista completa:
De todos modos, el de los aviones agrícolas no deja de ser un mercado bastante acotado. Sin ir más lejos, la firma vende al año no más de 80 aviones en Brasil y otros tantos en Argentina, que en otra época supo invertir mucho más en esta tecnología. Los problemas de rentabilidad que atravesó el agro durante los últimos años, de la mano de la sequía y los altos costos, revirtieron esa tendencia.
Pero, ante una mejora en las variables macroeconómicas y una mayor estabilidad, el vendedor brasileño confía en que, si eso “derrama” en un mayor acceso al crédito, probablemente haya más nuevos AirTractor volando. Sea para pulverizar agroquímicos o para combatir incendios, otra arista en la que la actividad ha demostrado ser efectiva y gana terreno.
“Es un país muy grande, con tierras muy buenas, y hay mucho para crecer. Creemos que en Argentina el mercado se va a recuperar”, concluyó Pires da Silva.




