Un año atrás el gobierno de Alberto Fernández decidió no extender las concesiones ferroviarias para que la gestión de los trenes de carga pasen a manos del Estado.
En ese marco, a fines del presente mes de junio la concesión en manos de Ferroexpreso Pampeano, que gestiona el corredor Rosario-Bahía Blanca, debía darse de baja. Pero eso no sucederá porque el gobierno acaba de extender la concesión, de manera precaria, por otro año más.
El motivo de tal decisión, según lo establece la resolución 353/2022, reside en el hecho de que es “fundamental que el Estado nacional genere los mecanismos que permitan contar con los recursos económicos que permitan priorizar las tareas de mantenimiento y las inversiones prioritarias a desarrollar, fortaleciendo las condiciones de operación e incrementando las posibilidades de previsibilidad a todos los actores”. Traducido: el gobierno argentino no tiene recursos para poder hacer frente a la gestión de la empresa.
El corredor, integrado por las líneas Rosario-Puerto Belgrano y Huinca Renancó-Ingeniero White, entre otros ramales alimentadores, tiene aproximadamente 5200 kilómetros de vías.
Entre sus principales actividades se encuentra el transporte de soja y maíz, como así también, arena a granel desde YPF-Luján hasta Bahía Blanca. Los principales accionistas de la empresa ferroviaria pertenece son Techint SA y Sociedad Comercial del Plata.