Argentina tiene una oportunidad enorme este año. Canadá es un gran exportador de arvejas a China, pero acaba de sufrir una represalia comercial por parte de la nación asiática –un arancel 100% impuesto a partir de marzo pasado–, lo que abre una oportunidad para proveedores alternativos.
La única legumbre argentina habilitada para ingresar a China es precisamente la arveja, un cultivo que viene mostrando avances, aunque aún falta mucho para poder emular a las grandes naciones exportadoras del grano.
En ese sentido, se conoció esta semana un dato alentador: el 53,8% del área sembrada con arveja en la última campaña 2024/25 se implantó con cultivares con propiedad intelectual, lo que representa un avance con respecto al 46,6% registrado en 2023/24.
En el primer puesto del ranking de variedades sembradas en 2024/25, según datos oficiales publicados por el Instituto Nacional de Semillas (Inase), se ubicó Viper (registrada en 2001) con un 31,5% del área nacional.
En los siguientes lugares se ubicaron los materiales Aviron (2019) con un 22,1% de la superficie, Bicentenario (2012) con un 6,0%, Avenger (amarilla; 2016) con un 5,9%, Curling (amarilla; 2016) con un 4,5%, Aragorn (2020) con 4,2%, Kingfisher (2019) con un 3,6%, Facon (2000) con 3,5%, Balltrap (amarilla; 2016) con 3,0% y Bluestar (2011) con 2,9%, entre otras.
Los cultivares con propiedad tienen una antigüedad promedio de poco más de siete años, mientras que los que ya no cuentan con propiedad tienen una antigüedad superior a 21 años.
Para promover el progreso genético de la arveja, las autoridades del Inase, por medio de la resolución 489/2025, dispusieron que a partir del 1 de octubre de 2025 sólo podrá comercializarse semilla fiscalizada de esa legumbre.
Por otra parte, a partir del último lustro se observa un crecimiento sostenido del uso de semilla fiscalizada, lo que indica que muchos productores están optando por usar semillas con genética moderna.
En 2024/25 el área sembrada con arveja en la Argentina fue de 83.295 hectáreas, una cifra 8,2% mayor a la implantada en el ciclo anterior. También creció la cantidad de productores que apostaron por el cultivo. El 76,5% de la superficie correspondió a cultivares de arveja verde, mientras que el 23,2% restante a amarilla.
El 64,4% del área se ubicó en la provincia de Buenos Aires, mientras que el 18,6% se sembró en Santa Fe y el 12,2% en Córdoba, entre otras provincias. Apenas el 10% de los productores concentró el 48% del área nacional.