El caso del Tambo La Resistencia, ubicado en la zona rural de Rosario, volvió a copar la agenda pública tras años de silencio y a pocas horas de que los santafesinos vayan a las urnas. En realidad, todo empezó con una “fake news” publicada en las redes sociales, en la que se mostraron supuestos carteles de quien encabeza la lista de Fuerza Patria, Caren Tepp, con leyendas que hacían referencia al modo en que fue “recuperado”, hace ya 10 años, ese establecimiento.
“Frenar a Milei. Expropiar todos los campos”, fue una de las frases en los carteles falsos que se replicaron en redes sociales y que un reciente fallo judicial ordenó quitar de circulación.
Lo cierto es que esta operación política volvió a poner en escena una historia protagonizada por militantes de Ciudad Futura, el espacio que dirigen Tepp y Juan Monteverde, mientras se alistan los cierres de campaña y se dispone todo para disputar las 9 bancas el domingo.
“Usurpación” versus “proyecto productivo legal”. Son las dos carátulas de un caso que tiene tanto de intrincado como de interesante.
A los fines prácticos, tal vez sea mejor empezar por el final. Hoy, la Cooperativa de Trabajadores Rurales Unidos sigue produciendo como desde hace 40 años en su establecimiento del barrio Nuevo Alberdi, ubicado en el noroeste del Gran Rosario. Allí, además de 1200 litros diarios de leche fresca, elaboran 7 variedades de queso y dulce de leche que luego venden en su propio negocio, “La Lechería”, o bien a través de sistemas de suscripción. No trabajan con intermediarios. Se presentan como “el último tambo de Rosario”.
La ubicación del tambo no es menor, porque configura el eje del conflicto. El dueño original de ese campo era Mario Benito Jáuregui, un empresario vinculado al desarrollo inmobiliario que en 2007 se lo alquiló a Oscar Licera. En realidad, Oscar había sido el tambero a cargo de ese establecimiento por tres décadas, y el único que lo sostuvo una vez que su patrón se fue. Sin escritura ni papeles sobre esa propiedad, aceptó firmar un comodato de alquiler por 5 años.
Una vez que ese compromiso venció, Licera no devolvió la propiedad a Jáuregui, que inició acciones legales y logró que en diciembre del 2012 la justicia aprobara el desalojo. Fue en ese punto donde el litigio entre privados tomó dimensión pública y política, porque el movimiento Giros -que ya comandaban Tepp y Monteverde y luego se convirtió en Ciudad Futura-, auxilió a Licera y convirtió el establecimiento en lo que hoy se conoce como Tambo La Resistencia.
Lejos de terminar ahí, el caso llegó a la Corte Suprema de Justicia. De un lado, el movimiento Giros argumentaba que el desalojo significaba la pérdida de fuentes de trabajo y el sostén de una comunidad, y del otro, había un dueño que reclamaba su tierra, en una zona codiciada por el potencial que tenía para hacer desarrollos urbanísticos de alta gama.
El respaldo político evitó que la constructora de Jáuregui, Cimar SA, se hiciera con ese establecimiento. La apelación a ese intento de desalojo llegó a la Corte Suprema de Justicia santafesina, que en 2016 admitió el recurso de inconstitucionalidad que había interpuesto Ciudad Futura, desde donde señalaban que el el tambero había firmado el comodato “bajo engaño”, por lo que “carecía de validez”.
Pero, tres años más tarde, ese mismo tribunal declaró que el recurso era “inadmisible” y volvió a dejar firme el desalojo. Sustentados en leyes que protegen la agricultura familiar y frenan los desalojos rurales, los dirigentes de Ciudad Futura apelaron a la Corte Suprema de la Nación, que admitió la presentación.
Un punto y aparte fue puesto en 2021, cuando se aprobó un nuevo ordenamiento territorial en Nueva Alberdi y las partes firmaron un acuerdo: La constructora se comprometió a proveer un nuevo predio, y el tambo a trasladarse en un plazo máximo de 3 años, siempre y cuando estuviera la infraestructura lista. Aún ese traslado no se hizo efectivo.
No hubo conflicto previo. Hubo DELITO DE USURPACIÓN. El tambo tiene dueño. Se llama Mario Jauregui. Y el Oscar del que hablan era el que le alquilaba el tambo a Jauregui y cuando se le venció el contrato en lugar de devolverlo llamó a CAREN TEPP para que lo ayude a usurparlo. 18… https://t.co/1QLx17TrsR pic.twitter.com/H6PbJygc3U
— María Florencia Arietto 🇦🇷 (@florenciarietto) October 22, 2025
En estas horas, la abogada Florencia Arietto, que además es senadora de La Libertad Avanza en la Provincia de Buenos Aires, volvió a denunciar en entrevistas televisivas y en sus redes sociales que la candidata Caren Tepp fue una de las artífices de ese “delito de usurpación”.
Eso motivó la respuesta desde Fuerza Patria, cuya lista santafesina Tepp encabeza tras haberse impuesto sobre Agustín Rossi. “Se hizo con un acuerdo legal y judicial de por medio. No hubo toma ni usurpación”, replican desde el espacio, en línea con el argumento de que la intervención de Ciudad Futura permitió que despegara la producción de ese establecimiento y se evitara de desalojo de otras 200 familias del barrio, según consignó la propia Caren Tepp en una entrevista con Página 12.
En plena campaña electoral de cara a las elecciones provinciales, celebradas el mes de junio, contó el caso en una entrevista con El Protagonista Web, también habló de ese cambio productivo. “Cuando lo conocimos el tambo era un par de chapas, un espacio reducido de ordeñe con brete a la par con solo 3 bajadas y un motor naftero. Hoy tiene más de 200 animales entre vacas, vaquillonas y terneros, y también montamos una planta láctea para agregar valor en origen que fabrica quesos y dulce de leche”, relató.
Ese relato también lo sustenta una suerte de “historia oficial” -léase entre comillas- que consta en la página web del Ministerio de Desarrollo Social de la Nación, una nota que data de cuando esa cartera existía, en tiempos del gobierno anterior.
“Un grupo de jóvenes se opusieron a un negocio inmobiliario que buscaba hacerse de grandes parcelas de tierra que pertenecían a productores lecheros y ladrilleros. Este conflicto que amenazaba con desaparecer todo un sector rural se resuelve gracias a la propuesta de crear una cooperativa para recuperar un tambo y hacerse dueños de esas tierras productivas”, señala el portal, que evita hacer mención al reclamo de Jáuregui y los varios litigios judiciales.
La elección de haber empezado a contar esta historia desde el final no es casual porque, por fuera de las acusaciones que hoy se reavivan, a días de que se abran las urnas, el tambo La Resistencia, el último que queda en esa región, opera con normalidad.
De hecho, semanas atrás, el espacio Ciudad Futura, en un posteo en redes sociales, dio a entender que ya se está preparando el nuevo predio, que es aún el punto del acuerdo -firmado en 2021 por ambas partes en conflicto- que no han cumplido. Si se consuma esa mudanza en los términos establecidos, el conflicto llegará a su fin. Pero, hasta que eso suceda, todos los señalamientos y sospechas aún tienen lugar.
Pero ninguna polémica abierta debería dar espacio a “fake news” que contaminan la democracia. Eso nunca.
Gracias por la nota. Apoyo desde mi pensamiento ése proyecto y la fuerza de ésa gente que recupera un tambo, nobes moco de pavo un tambo… por el trabajo que lleva, la cantidad de alimento que produce… les faltaría hacer crema y manteca que es una pavada…
Y conflictos siempre puede haber.. el tema es que se vayan acordando y cumpliendo…
Lo de la fake news ea juego sucio pero sirvió para hacer periodismo de verdad….
Fuerza Ciudad Futura…