La provincia de Santa Fe presentó ante los operadores del mercado agrícola su proyecto para poder ordenar finalmente (aunque parezca una utopía) el tránsito de cerca de 2 millones de camiones que todos los años ingresan a los puertos y fábricas del gran Rosario, provocando una alboroto mayúsculo. La idea es impulsar un plan de obras por 150 millones de dólares, que a su vez daría luego pase a un peaje unificado para ingresar al sistema, que estaría a cargo de la provincia y podría llegar a costar (aunque es prematuro decirlo) unos 45 dólares por camión.
Este jueves, los ministros de Obras Públicas, Lisandro Enrico, y de Desarrollo Productivo, Gustavo Puccini, se sentaron delante de una amplia mesa de trabajo en la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR), y allí presentaron el llamado “Circuito de Ingreso a Puertos (CIP)” que están planificando a pedido del gobernador Maximiliano Pullaro. La iniciativa de ordenar un tránsito de unos 5.000 camiones diarios cobró potencia luego de que muchos municipios que albergan puertos y plantas aceiteras comenzaran a aplicar tasas abusivas para el arreglo de sus resp3ectivas redes viales.

“Las autoridades provinciales presentaron avances en inversiones viales y en los sistemas de gestión de cupos, cargas y descargas. A su vez, manifestaron que es importante escuchar a todas las partes involucradas en la elaboración e implementación de esta propuesta que apunta a lograr una concesión del sistema para poder desarrollar un plan de obras y mantenimiento”, dijo un comunicado oficial sobre dicha reunión.
“Hace ya casi un año que venimos insistiendo en que hay una necesidad imperiosa de tener un acceso a puertos planificado”, aseguró el ministro Puccini, quien justificó que “los puertos están muy vinculados a las ciudades, lo que genera congestión ante la llegada de miles de camiones, sumado al estado en que se encuentran muchas de las rutas nacionales”.
El funcionario santafesino destacó que con este plan se busca “que haya una franja horaria de 12 horas en donde los camiones tengan que llegar al puerto para evitar el embotellamiento que se produce actualmente”. Una de las ideas, en este sentido, es efectuar controles para que “si un camión circula fuera de la franja horaria habilitada, no siga adelante para evitar la congestión”.
El funcionario enumeró, además, “diez obras” que deberán realizarse en la zona de acceso a los puertos con dinero prestado por la CAF (Banco de Desarrollo de América Latina y el Caribe) por 150 millones de dólares. A esto se suma “la obra del tercer carril sobre la Autopista Santa Fe-Rosario, que con casi 30 millones de dólares de recursos propios, estamos haciendo desde el gobierno provincial”.
Por su parte, el ministro Enrico indicó que el CIP servirá para planificar, organizar y ordenar el ingreso de los camiones a los 32 puertos que van desde Timbúes hasta Arroyo Seco y donde convergen rutas nacionales, provinciales, caminos municipales y vías férreas.
El ministro destacó que la propuesta del Gobierno Provincial es “un ingreso único portuario que circunscriba geográficamente cuales son las rutas que los camiones de diferentes provincias van a utilizar para ingresar a los puertos del sur santafesino y como hacemos para que eso se ordene en ese único circuito, con una única concesión y un único mantenimiento con obras permanentes”.
Claramente subyace la intención de imponer un único peaje unificado, en una concesión que todavía está por definirse. Según distintos testimonios alentados por declaraciones periodísticas previas del propio Enrico, se calcula que ese peaje para ingresar al nuevo sistema podría llegar a ser de 45 dólares por cada uno de los camiones.

El periodista Mariano Galíndez, especializado en información sobre el mercado granario, comentó en sus redes sociales que el plan tendrá varias etapas:
- Las obras de reconstrucción de accesos y nuevas rutas la financia la provincia (con deuda tomada en el mercado y de organismos de crédito multilateral).
- Luego habrá una concesión única de la red que cobrará el peaje del acceso al sistema.
- Las localidades dejarán de cobrar tasas viales y recibirán “coparticipación” del peaje para afrontar costos de servicios municipales que demanden por el ingreso (no los viales que hará el concesionario). Será un golpe para sus cajas porque hoy usan esa tasa para otros gastos.
- El concesionario del CIP puede ser público o privado. La idea es primero obras, luego peaje. Es clave, y parece difícil, que Nación ceda administración de tramos locales de rutas nacionales a la provincia.
- El gobierno aprovechó y presentó pedidos al gobierno nacional de cambios al sistema STOP para que los cupos de ingreso de camiones con granos no sean diarios, como hasta ahora, sino por franja horaria, lo que aliviaría el tránsito.





