La cosecha de soja entró en su etapa final: solo quedan 450 mil hectáreas por levantar. Esteban Copati, jefe del equipo de estimaciones de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires, publicó una interesante “radiografía” de los rendimientos que se lograron en las diferentes regiones productivas. En el promedio nacional, para sojas de primera y de segunda, el rinde argentino quedó en 32 quintales por hcctárea, con picos de 36,4 quintales en la zona núcleo.
Según la Bolsa porteña, la campaña 2016/17 cerró con un volumen total de 57,5 millones de toneladas. Se convirtió en la segunda más grande de la historia. La marca récord continuará siendo la de la campaña 2014/15, con 60,8 millones toneladas.
Pero este año finalmente sí resultó récord en materia de rendimientos. El informe precisó que el rendimiento nacional -exactamente de 31,9 quintales por hectárea- supera al anterior máximo de 31,7 quintales que se registró en aquella campaña 2014/15. En aquel momento, en consecuencia, se sembró una superficie mayor con la oleaginosa. O no se perdió tanta.
Otro dato importante para el balance, en ese sentido, es que el área perdida por los excesos hídricos fue calculada en 1,15 millones de hectáreas, la mayor en lo que va de este milenio.