En el comienzo del Congreso Maizar, que arrancó esta manaña en formato virtual, todas las miradas estaban puestas en el discurso de apertura que ofrecería el ministro de Agricultura, Luis Basterra, luego de que anoche el ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, anunciara el cierre de las exportaciones de carne vacuna por 30 días. Pero no pudo ser.
En la apertura del evento Basterra no se hizo presente. “Un cambio en su agenda de último momento”, le indicaron desde la cartera agraria a Alberto Morelli, presidente de Maizar, quien debió anunciar el inicio del evento en soledad.
El discurso de Morelli recorrió en primer lugar las últimas cifras del complejo maicero: subió del tercer puesto al segundo en el ranking mundial de exportadores y , según datos oficiales, está quinto en la lista de los principales sectores exportadores del país. Además, anunció que según estudios de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires se prevé una cosecha de 46 millones de toneladas para esta campaña, teniendo en cuenta las buenas perspectivas climáticas.
A continuación el presidente de Maizar afirmó que “para continuar invirtiendo, generando nuevos puestos de trabajo, conquistando nuevos mercados y aportando al desarrollo nacional, necesitamos un marco de previsibilidad. Los problemas macroeconómicos, particularmente el alto nivel de inflación, la altísima presión tributaria y el sistema de precios máximos, afectan severamente a los productores y a la agroindustria en su conjunto”.
“Nuestra cadena sufre la amenaza recurrente de un aumento en los derechos de exportación o el cierre de las mismas que van en contra de la previsibilidad necesaria para operar y proyectar su desarrollo. A fin del año pasado nos sorprendió amargamente la medida el cierre transitorio del mercado de exportación de granos, que luego se modifico por una cuotificación; nunca falto maíz en la argentina”, agregó.
Luego Morelli se refirió a los recientes anuncios del gobierno. “Hoy amanecemos con medidas sumamente negativas, que ya experimentamos en el pasado y rechazamos de plano, como es el cierre de las exportaciones de carne vacuna”.
“El resultado es conocido”, prosiguió. “Pérdida de confianza en nuestros mercados de destino que nos llevo años reabrir, pérdida de ingresos para el país, pérdida de puestos de trabajo, perdida de inversiones y stock de la cadena ganadera, en definitiva, una vez más recorremos el camino inverso al desarrollo y crecimiento”.
“Hacemos un llamamiento a las autoridades para que recapaciten y revean esta medida tan desafortunada e incongruente para el momento económico que vive el país”, dijo. Y, como si eso fuera poco, la apertura incluyó también la mención a la situación de biocombustibles y de la Hidrovía.
“Nos preocupa la indefinición sobre la ley de biocombustibles, que tiene en vilo a once plantas destinadas exclusivamente a la producción de etanol de maíz, con 2000 empleos directos en nuestra cadena que están en riesgo; la prorroga de 60 días nos parece insuficiente. Necesitamos una ley superadora, consensuada y con un corte creciente de biocombustibles en un futuro cercano”, señaló.
Acto seguido sostuvo que abogan por que “se realice una nueva licitación de la Hidrovía, con una concesión privada y transparente que mejore la competitividad de las exportaciones en el mundo”.