Si vamos a tener un “cosechón” de maíz, como muchos dicen, es importante saber a qué destinamos tantos granos. “Podemos hacer mucho, porque tenemos el maíz, tenemos los productores, los innovadores y los que quieren agregar valor. Lo que tenemos que hacer es crear las condiciones para que eso suceda”, dijo a Bichos de Campo, Alicia Ciciliani, ministra Producción de Santa Fe.
Para transformar el maíz en bioetanol o la soja en biodiésel, la funcionaria destacó que “se necesita que no cambien las reglas de juego. Los actores están, las inversiones fueron hechas, y hoy el Gobierno cambió la ecuación económica con una fórmula que pone en situación de trabajo a pérdida a los inversores. Ese contexto que no respetamos va en sentido contrario a lo que todos acordamos que debemos hacer”.
Ciciliani, que participó de un bloque de Bioenergías durante el congreso de Maizar, reconoció que “estamos en un año electoral. Por eso yo le preguntaría a cada candidato cuál será su política agropecuaria. Porque escucho a diario críticas hacia los adversarios pero no escucho cuál será la política de futuro para el sector agroindustrial”.
“Por eso creo que una nueva ley de biocombustibles debería estar en la agenda de todos los candidatos presidenciales”, enfatizó.
Escuchá el reportaje completo a Alicia Ciciliani:
Ciciliani recordó la creación en 2018 de Liga Bioenergética de las Provincias, en la que participan Córdoba, Tucumán, Santa Fe y Salta. “Es la representación de los gobiernos provinciales más los inversores y los productores del sector, y se creó para que tengan una voz común, y para llevar una nueva ley de biocombustibles”, afirmó.
En la provincia de Santa Fe, según la funcionaria, “ya circulan en Rosario unidades automóviles de transporte combustible alimentadas con 100% de biocombustible. Con esto demostramos en la práctica que no sólo es posible aumentar el corte, sino que podemos hacer funcionar los automóviles solo con biocombustibles”.
Ciciliani consideró que, por la crisis de la Peste Porcina en China, “estamos ante una oportunidad enorme, ya que el 10% de los cerdos del mundo están muriendo o siendo sacrificados por esta peste. Entonces la demanda mundial crece y nosotros tenemos la oportunidad de transformar el maiz en carne”, explicó.
Por eso pidió “incorporar a la ecuación de rentabilidad, los costos ambientales y de salud, porque estamos ahorrando al usar una energía más eficiente”.
“No puede ser que cuando se hable en Argentina de política energética, se hable de Vaca Muerta o de biocombustibles. Nosotros queremos hablar de Vaca Muerta y de biocombustibles, pero esto es posible si generamos las condiciones posibles para tener una rentabilidad adecuada”, enfatizó Ciciliani.