La campaña agrícola argentina 2022/23 resultó afectada en términos productivos por una fase ENSO “La Niña” que liquidó gran parte de la cosecha esperada. Se preveía que en 2023/24, con el ingreso de “El Niño”, la producción se recuperase de manera notable, pero aparecieron inconvenientes que recortaron los potenciales de rendimientos agrícolas en muchas zonas productivas.
La mala noticia es que uno de los principales centros de estudios climáticos del mundo que realiza un seguimiento del fenómeno Niño-Oscilación del Sur (ENSO por sus siglas en inglés), que comprende la oscilación de parámetros meteorológicos del Océano Pacífico ecuatorial, prevé que se viene otra fase “Niña” en 2024/25, la cual suele promover restricciones hídricas en la mayor parte de las zonas agrícolas argentinas.
El último pronóstico elaborado por Climate Prediction Center e International Research Institute for Climate and Society (CPC/IRI) indicó que existe un 71% de probabilidad de ocurrencia de un evento “Niña” en el trimestre agosto/octubre de 2024, mientras que esa probabilidad se encuentra en un 68% para septiembre/noviembre de este año.
La cuestión es que, al observar que hay dentro del promedio ponderado, se observa bastante uniformidad en las predicciones realizadas por los diferentes modelos climáticos de los más importantes centros de investigación en la materia.
En el escenario climático planteado por CPC/IRI los cultivos de granos gruesos en el Cono Sur serían los más comprometidos, mientras que los cereales de invierno se desarrollarían en el marco de una fase “Neutra”.
Vale considerar que el pronóstico, en caso de presentarse, podría manifestarse con una potencia débil, además de que el mismo, si bien es un factor global determinante de la variabilidad climática, está influenciado en el Cono Sur por otros factores –como la dinámica del vórtice polar– que sólo pueden ser predichos con una o dos semanas de anticipación.
El fenómeno Niño-Oscilación del Sur (ENSO por sus siglas en inglés), que comprende la variación de parámetros meteorológicos del Océano Pacífico ecuatorial, influye de manera determinante en los regímenes de precipitaciones de diferentes regiones del mundo.