Que sí, que no. Que vamos, que venimos. Así viene siendo el recorrido del proyecto de ley de fomento a las agroexportaciones que el Consejo Agroindustrial Argentino (CAA) busca meter en el Congreso, y que el gobierno viene dilatando. Lo cierto es que a esta altura las señales, más que confusas, parecen meras maniobras de entretenimiento.
A principio de este año en la apertura del período legislativo, Alberto Fernández prometió impulsar una Ley Agroexportadora consensuada con el sector. ¿Cuál era el objetivo? Fomentar las exportaciones sin costo fiscal, e incrementar en 15 mil millones de dólares el ingreso de divisas y crear 700 mil puestos de trabajo. El bloque de más de 60 cámaras vinculadas con el sector rural venía trabajando en ello desde mediados de 2020. Recorrió los despachos de los principales líderes políticos, incluso el de la vicepresidenta Cristina Kichner, para conseguir una venia.
La promesa quedó en la nada y a principios de junio pasado, hace más de dos meses, José Martins, presidente de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires y coordinador del CAA, manifestó en una conferencia de prensa virtual la decepción del Consejo por el estancamiento en las negociaciones. En esa oportunidad Martins indicó que a partir de marzo “todo se fue diluyendo muy rápido”.
Esas declaraciones parecieron servir de algo porque al día siguiente Alberto Fernández invitó a representantes del CAA a la Casa Rosada, que consideraron luego que el encuentro fue “positivo” pues se llevaban “el compromiso de que el proyecto no está en vía muerta”. El Presidente los recibió con medio gabinete de ministros, a los que instruyó a seguir trabajando con el sector privado.
Sesenta días ya pasaron de esa reunión y hoy, teniendo a las elecciones legislativas de frente, la sensación es otra. “Lamentablemente entramos en una etapa donde sabemos que esto quedará dormido. Me imagino que empezará a moverse recién en diciembre”, señaló Martins durante una entrevista con Carlos Etchepare en Canal Rural.
“Nosotros teníamos un proyecto ómnibus que entendimos que tuvimos que segmentar. El presidente nos recibió nos dijo que nos quedemos tranquilos, que va al congreso, y no entendemos qué sucede que se frenó”, afirmó el vocero del CAA.
-¿Sentís que te están entreteniendo para hacer lo que ellos quieren hacer?- le preguntó el periodista.
-Lo pienso a menudo. Más allá de que este espacio de coalición nos bicicletee, estoy convencido del proyecto, de que debe haber un proyecto agroindustrial que pelee en un nivel tal que deje las tensiones de la cadena de lado. Puede ser que haya algunos que nos estén durmiendo, pero me consta que hay otros que están interesados en que esto funcione.
Si bien Martins aseguró que el dialogo no se cortó y que en el último tiempo el trabajo del Consejo se ha ampliado, lo cierto es que una vez más la faceta más conciliadora de Alberto quedó más para la foto que plasmada en los hechos.