El sudoeste chaqueño está complicado por lluvias torrenciales. Cayeron unos 300 milímetros, que provocaron inundaciones en áreas urbanas y rurales, de acuerdo a información del ministerio de Gobierno provincial. De hecho, equipos de trabajo de la Administración Provincial del Agua (APA) se encuentran realizando trabajos de limpieza de canales y monitoreo de estaciones de bombeo.
“Según los registros oficiales, en Gancedo cayeron 350 milímetros de agua en 4 horas, en Hermoso Campo 300 mm, en Chorotis 250 mm, y en Santa Silvina, Pinedo y Villa Ángela 250 mm (en cada localidad). El Servicio Meteorológico pronostica una mejoría temporaria para este sábado”, comunicó el gobierno de Chaco.
El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) emitió un informe en el que alerta por tormentas fuertes que podrían prolongarse hasta el martes 18 de febrero en el Centro y sur de Chaco, Centro y sur de Corrientes, Norte de Santa Fe, Centro y este de Santiago del Estero. “Algunas pueden ser localmente fuertes y estar acompañadas de fuerte actividad eléctrica, abundante caída de agua en cortos periodos, ráfagas y ocasional caída de granizo”, comunicó el SMN.
“Los montos de precipitación total acumulada podrán ubicarse entre 20 y 100 mm en el transcurso del viernes 14. Los valores mayores se esperan especialmente sobre el centro y sur de Chaco y el este de Santiago del Estero, en donde puntualmente podrán superarse los valores mencionados anteriormente”, agregó el SMN.
Testimonios de productores
El productor Rubén Rach de Charata, al sudoeste de Chaco, comentó a Bichos de Campo que “la lluvia fue importante. En la zona urbana cercana a Charata cayeron unos 120 milímetros, pero en la zona rural fue más abundante, de 260 milímetros, y hacia Gancedo el panorama es más complicado, con 360 milímetros caídos. Y la complicación viene porque venimos de un 2019 con excesos hídricos, en donde superamos ampliamiente los milimetrajes históricos en la zona”.
“Hasta ayer teníamos muy bien implantados los cultivos de soja, maíz y algo de algodón, el cual ya venía perjudicado por picudo. Y aunque es temprano para hacer una evaluación de daño, la situación de momento es complicada. Estos milímetros caídos nos perjudican, por eso espero que no se den más lluvias como estima el SMN, porque se agravaría la situación”, agregó Rach.
El productor destacó que debido a este panorama, y ante la posible pérdida en plena campaña de cultivos, “es bueno intentar sobrellevar la situación con alguna reserva de campaña anterior, pero si ya se repite como ahora, el hecho de tener dos campañas seguidas con problemas de agua, se complica más el panorama. Esperemos que el clima y Dios se apiaden de nosotros”.
Walter Islas, ingeniero agrónomo y asesor de empresas agropecuarias en el límite entre Chaco y Santiago del Estero, vive en Gancedo, en donde ocurrió el temporal, dijo que “desde octubre al momento llevábamos entre 500 y 550 milímetros caídos, pero las últimas lluvias complicaron el panorama. En un campo llovieron 400 milímetros, y ahora el mismo se encuentra drenando, pasando el agua en plena ruta, y la complicación es que el drenaje de esa agua caída en los campos del norte de Gancedo, donde yo asesoro, alimentan la cuenca del Palmar, y van a terminar provocando anegamientos en la zona”.
Entre las localidades inundadas según Islas, al momento, figuran Gancedo, Pinedo, Hermoso Campo, Charata y Corzuela. “Estas zonas ya venían con problemas de anegamiento. En el corto plazo, hay muchos caminos rurales y rutas complicadas, y a nivel productivo, la soja, que ya estaba en período reproductivo avanzado, entre R3 y R5, ya presenta problemas de anegamientos en muchos lotes, y hay lotes de maíz de primavera que estaban siendo cosechados o a punto de ser trillados, y ahora se complica también su situación. Y también se estaban cosechando algunos lotes de sorgo. Un productor de Pinedo por ejemplo, me comentó que tiene unas 400 hectáreas de sorgo que estaban para ser cosechadas y ahora no podrá hacerlo”.
Ernesto Luis Iván, productor de La Tigra, al sur de Sáenz Peña, Chaco, comentó que “los pronósticos no son alentadores. Por razones de seguridad se efectuó el corte total de la ruta nacional 89 que une a Chaco con Santiago del Estero, y se destaca por atravesar zonas altamente productivas. En este momento, hay 40 centímetros de agua sobre la calzada”.
Iván remarcó que “el agua se desplaza hacia el sur por arriba de la cinta asfáltica. Llama la atención que, mientras esto sucede en el sudoeste, la zona centro norte de la provincia sigue con un déficit de agua importante y al momento no se registran precipitaciones”.
Recientemente, las provincias de Santa Fe, Chaco y Santiago del Estero acordaron un Plan Hídrico, con el objetivo de solucionar los problemas recurrentes de los bajos submeridionales, como inundaciones, sequías y anegamientos, promover un manejo coordinado y racional de los recursos hídricos, con obras de infraestructura que lleven soluciones a las tres provincias. El Plan lleva la firma de los tres gobernadores de las provincias involucradas: Omar Perotti, Jorge Capitanich y Gerardo Zamora.
Durante 2019, en la provincia de Chaco habían llovido entre 1600 y 2000 milímetros, lo que es una cifra muy alta si se piensa que la media anual histórica para la zona estaba entre 770 y 800 milímetros.