La soja no transgénica se presenta como una oportunidad de negocios para la Argentina porque ya no solo el mercado europeo y norteamericano pide este producto sino también ha aparecido demanda en el mercado interno. Es que la movida vegana y ambientalista busca productos no OGM para la alimentación humana y el segmento de las bebidas vegetales y los sustitutos de la carne son una gran oportunidad.
En este marco, Haziak -empresa fundada por el ingeniero agrónomo y fitomejorador Julio Ferrarotti, quien durante muchos años lideró el semillero Relmó-, apuesta todas sus fichas a abastecer a estos diversos mercados y hasta proyecta comenzar a producir esa variedad convencional de soja en Uruguay.
Concretamente, en la actual campaña Haziak sembró dos variedades, la HZ937 que es considerada de grupo largo, y la HZ313 grupo 5 corto. Según detalla Ferrarotti, en ambos casos se lograron rendimientos iguales y hasta superiores a las variedades convencionales transgénicas.
En el caso de la variedad HZ937, teniendo en cuenta que fue una campaña donde la sequía complicó muchos planes, en las localidades cordobesas de Monte Buey y General Viamonte se obtuvieron rendimientos promedio de 45 quintales por hectárea, con picos de hasta 61 quintales. Luego, con la variedad HZ313, que se sembró en la zona de Monte Buey, se consiguieron en promedio 32 quintales con picos de 45, frente a variedades OGM que estuvieron cerca de los 30 quintales.
Para la próxima campaña, desde la empresa esperan contar con mayor disponibilidad de semillas y así alcanzar un piso de siembra de 400 hectáreas. Otro plan, hacia el futuro, sería sembrar también en Uruguay porque allí el mercado chino se está abasteciendo de soja no transgénica con sobreprecios de hasta el 15% y en un mercado en el que no hay retenciones.
Según Ferraroti los chinos están comprando soja no OGM para alimentación humana, más precisamente para el ejército de ese país.
En lo que respecta al mercado argentino, aquí la cuestión es bastante más variable. En algunos casos los compradores ofrecen sobreprecios, pero en otros se transa con valores fijos que pueden llegar a 40 dólares adicionales por tonelada.
Un dato interesante: la soja no OGM de Argentina se está exportando principalmente desde la terminal portuaria que tiene la firma Grobocopatel Hermanos en San Pedro, provincia de Buenos Aires, que se está especializando en especialidades. La exportación de este tipo de productos debe seguir diversos protocolos para que sea aceptada por el mercado internacional y es fundamental que no haya contaminación con soja transgénica.