La AFIP ya había dicho que no al pedido de algunos sectores de la producción, en especial nucleados en CRA, que querían transar sus granos directamente en dólares, para evitarse así perjuicios con las notables oscilaciones en el tipo de cambio. ¡Nada de verdes! Este es un país soberano y los negocios deben hacerse en pesos, habrán pensado más o menos en el organismo tributario antes de rechazar de plano esa posibilidad.
Pero el problema existe: los productores vendan granos que cotizan a precios dolarizados. Pero esos pagos son realizados en pesos, que pierden poder de compra a la hora de que ese mismo productor tiene que salir a comprar insumos, que muchas veces también tienen sus precios en la divisa extranjera. Además, si los pagos se demoran varios días, el chacarero puede perder mucho dinero en la oscilación de un mercado de cambios sumamente inestable.
En este escenario, y en busca de “brindar mayor respaldo a los operadores a la hora de liquidar en la moneda estadounidense”, la Secretaría de Agroindustria salió con una receta propia buscando calmar a los productores.
El organismo determinó, mediante una resolución de la Dirección de Control Comercial Agropecuario (ex ONCCA), que ante una venta de granos convenida en dólares estadounidenses, cuando los pagos al productor “sean parciales y/o finales, deberán ser liquidados tomando en cuenta la cotización de la divisa extranjera, al cierre tipo comprador del Banco de la Nación Argentina del día anterior a la fecha del efectivo pago”.
Es decir, al día de hoy debería aplicarse para cancelar esas ventas y convertir los dólares en pesos un tipo de cambio de 41 pesos por dólar, la cotización del lunes 25.
La disposición 9/2019, publicada en el Boletín Oficial, tiene “el objetivo de brindar un marco de certeza a los operadores en relación a la cotización de la divisa al momento del efectivo pago de las liquidaciones”, explicó en un comunicado el área de Agroindustria.
La decisión, sin embargo, no trajo calma a los operadores del mercado agrícola.
Javier Buján, corredor y directivo de la Cámara Arbitral de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires, opinó que la medida “no soluciona el tema de fondo que reclaman algunos sectores, que es la diferencia que existe entre el cobro de la mercadería vendida en dólares y el pago de insumos comprados en dólares”.
También aclaró que su aplicación “seguro traerá más peso administrativo, ya que las facturas de operaciones en dólares se hacen 72 horas antes del vencimiento (y hasta 10 días antes en algunos casos), con lo cual significará débitos, créditos, etcétera”.
Otra observación realizada por Buján fue que “la resolución habla de pagos parciales o finales sobre operaciones pactadas en dólares”. Esto significa que un contrato no se pesificará por su monto total sino factura a factura, siempre aplicando el tipo de cambio del BNA dle día anterior.
Otros operadores, de todos modos, tomaron la medida como positiva. “Lo mejor sería cobrar en dólares billete, pero mientras no se pueda eliminamos el riesgo de variación de tipo de cambio, que desde que facturamos hasta cobramos de es de 4 o 5 días. Ahora se limita a un día”, explicó uno de ellos.