En los últimos días algunos medios de comunicación publicaron versiones sobre propuestas de diferentes grupos privados que estarían interesados en “salvar” a SanCor luego de que dirigentes del gremio Atilra amenazaran con paralizar al sector lácteo hasta que aparezca una solución para la convaleciente cooperativa láctea
Pero todos cometieron un error: se olvidaron a llamar a algún referente de SanCor Cooperativas Unidas Limitadas para ver de qué se trataba el asunto.
Para saldar esa deuda, los representantes de la cooperativa difundieron un comunicado titulado “Todos hablan de SanCor, pero nadie habla CON SanCor” (¿será una indirecta?) en el cual aclararon que “el Consejo de Administración de SanCor no ha recibido ninguna comunicación ni propuesta de administración, apoyo financiero y/o de reestructuración de la cooperativa”.
“Desde 2017, SanCor realizó un importante proceso de reestructuración operativa, financiera y societaria que le permitió sostener sus operaciones productivas y comerciales. Lo hizo con el compromiso y la participación de los productores asociados, empleados, proveedores, clientes y consumidores a quienes agradecemos”, indica el comunicado.
La cooperativa recordó que, luego del proceso de reestructuración encarado entre 2017 y 2019, que incluyó la venta de buena parte de sus activos y un Acuerdo Preventivo Extrajudicial para abonar una porción de una enorme deuda comercial, actualmente dispone de seis plantas industriales que procesan diariamente 650.000 litros de leche que son empleados para elaborar leche fresca y en polvo, manteca, crema, dulce de leche y quesos. Cuenta con unos 1700 empleados que vienen cobrando sus salarios con importantes atrasos.La cuestión es que, debido a sus antecedentes, SanCor no cuenta con financiamiento bancario y comercial, lo que le impide capturar un mayor volumen de leche, algo necesario para licuar los elevados costos fijos que tiene y tornarse en una unidad industrial competitiva. De hecho, los directivos de SanCor apuntan a procesar al menos 1,20 millones de litros diarios de leche.
“Para lograr ese mayor volumen de operatoria, es imprescindible acceder al financiamiento del capital de trabajo destinado a la mayor adquisición de materia prima e insumos”, se señala en el comunicado, para luego añadir que eso podría lograrse a través de “aportes financieros o de inversión de organismos y/o instituciones públicas y/o privadas” o bien por medio de “la constitución de un fondo de garantías (con recursos estatales) destinado exclusivamente a la compra de materia prima e insumos”.
Una tercera alternativa es –según indicaron– contar con “apoyo gubernamental para el cobro de la deuda contraída por la República Bolivariana de Venezuela, por la provisión de leche en polvo. En este sentido, se solicitó la gestión pertinente a las autoridades nacionales, a través de la Cancillería”.
SanCor cuenta con una importante deuda dolarizada generada por operaciones impagas que se realizaron en el marco de un acuerdo firmado a fines de 2006 por la cooperativa con la entidad estatal venezolana Bandes, por medio del cual, además del envío de partidas de leche en polvo a modo de pago de un crédito de 80 millones de dólares concedido por esa entidad bolivariana, SanCor se comprometía a abastecer con ese producto al gobierno venezolano. La cuestión es que el cobro de esas exportaciones no se efectuaba de manera directa, sino a través del fideicomiso “Néstor Kirchner”, el cual era gestionado discrecionalmente, en el marco del programa “petróleo por alimentos”, por funcionarios kirchneristas y bolivarianos. Buena parte de las exportaciones de leche en polvo destinadas a Venezuela se hacían además con sobreprecios superiores al 50% (es que la leche que se enviaba allá era de muy buena calidad).
“Cabe destacar que el plan al que se alude fue revisado y validado por consultores designados por organismos oficiales, y fue presentado a las autoridades sindicales y de los gobiernos nacional y de las provincias de Santa Fe y Córdoba. Aún no hemos tenido respuestas concretas en materia de financiamiento y de recupero de la deuda del exterior”, explica el comunicado de SanCor.
“Si bien la cooperativa mantiene sus operaciones corrientes, es indispensable aumentar en el corto plazo el volumen de procesamiento de leche para evitar sobresaltos y dudas sobre sus posibilidades de éxito”, advierte.
“Desde el inicio del proceso de reestructuración, SanCor continúa siendo una cooperativa de productores lecheros, se mantiene abierta al diálogo y a escuchar ideas y propuestas dirigidas al logro de los objetivos establecidos. En este sentido, SanCor recibirá, analizará y definirá toda iniciativa que le sea presentada y que resulte útil y beneficiosa para sus asociados y partícipes del sistema pero que, a la fecha, no hemos recibido”, concluye el texto publicado por la cooperativa.