La Mesa de Enlace, que insiste en hacerse llamar Comisión de Enlace aunque nadie la denomine así, expresó este jueves sus reparos respecto del proyecto de ley de promoción de las inversiones agroindustriales que presentará el gobierno en las próximas horas, y que nació de un trabajo conjunto entre funcionarios y otros eslabones de la cadena agrícola agrupados en el Consejo Agroindustrial Argentino (CAA).
En un “mensaje”, las cuatro entidades que representan a los productores primarios dentro del CAA celebraron “el avance en proyectos legislativos que generen previsibilidad en el largo plazo” para el sector, pero a la vez advirtieron que este proyecto de ley que ahora se enviará al Congreso “no es más que un aporte menor de ideas elevadas al Poder Ejecutivo”.
“Son solamente medidas de fomento e incentivos para ciertas actividades que dependen de muchas pautas de cumplimiento y de presupuestos que no está establecido ni quien las regulará”, señaló la Mesa de Enlace, que a todas luces sostiene una relación histérica con el CAA, que agrupa a más de 60 cámaras del sector, incluyendo las cuatro organizaciones rurales, pero donde llevan la voz cantantes sectores más ligados a la exportación de granos y subproductos.
“Aspiramos a que nuestro país algún día tenga una Ley Agroindustrial que englobe a todos los sectores involucrados y por la cual hoy estamos integrando la iniciativa del CAA, donde perseguimos el objetivo de hacer aportes, desde las entidades de productores, participando de las mesas de trabajo conformadas en ese ámbito”, señaló la Mesa de Enlace, que de todos modos deja en claro que ellos quedaron afuera de la confección de este proyecto de ley.
En ese sentido, más allá de apoyar a regañadientes este proyecto, los ruralistas consideraron que “debemos lograr una ley de contenido mucho más amplio donde queden claras las premisas fiscales de reducción de los derechos de exportación hasta su eliminación para todas las actividades agroindustriales y economías regionales, además de operar con un único tipo de cambio”.
La rebaja de retenciones según pautas de crecimiento de las exportaciones era una de las opciones que preveía el proyecto original que fue consensuado en el CAA, pero ese capitulo luego fue excluido en las negociaciones con los funcionarios.