En el marco del nuevo Congreso de Aapresid, la empresa Bayer está presentando el primer producto agroquímico de la Argentina que, como las gaseosas o la cerveza, se comercializa en un envase retornable, es decir que puede volver a utilizarse. Los ensayos se realizaron con el glifosato Roundup Max, el más difundido de los herbicidas. “Esto no sólo brindará un servicio diferencial al cliente sino que además mejora la sustentabilidad de los productos”, indicó la compañía en un comunicado.
El nuevo envase se denomina IBC (industrial bulk container). Se trata de un contenedor industrial de 1000 litros reutilizable, que permite una reducción del 95% en el consumo de plásticos, pero también reduce el consumo de agua, ya que tras su uso ya no es necesario el “triple lavado” obligatorio con los bidones tradicionales para desactivar la presencia de los agroquímicos contenidos en los tradicionales bidones.
“En una prueba piloto realizada en 9 provincias durante 2020, con IBC Roundup Full 2, se ahorraron 22,9 toneladas de plástico y 622 metros cúbicos de agua”, indicó una gacetilla de la compañía, que determinó como objetivo para 2025 “lograr un ahorro de 675 toneladas de plástico y 12.850 m3 de agua en lavado de envases”. Bayer tiene previsto “llegar a que el 100% de sus operaciones sean carbono neutras en 2030 y reducir el 30% de las emisiones de efecto invernadero” y esto va en ese camino.
Bayer puede mostrar estos avances porque hace un par de meses el Senasa creó un marco legal que habilita la comercialización de fitosanitarios a granel en envases reutilizables con trazabilidad digital. Esos envases, según lo determinado por la resolución 245/2021, podrán tener una capacidad de 200 a 1000 litros y serán propiedad de la empresa elaboradora de fitosanitarios.