El cierre parcial de exportaciones (cepo cárnico), junto con todos los problemas derivados de la forma en la que se implementó la medida, está generando serios problemas en todos los eslabones de la cadena ganadera y, por su puesto, eso impacta en el precio de la hacienda.
Hoy miércoles hubo un ingreso reducido en el Mercado de Liniers, tal como viene sucediendo desde que el gobierno tomó la decisión de frenar las ventas de carne vacuna al extranjero. Los productores se llenaron de dudas, temiendo bajas en los valores que se fueron confirmando y en consecuencia se redujeron los envíos al mercado porteño.
El precio promedio logrado hoy en Liniers en la categoría novillo es un 16% más bajo respecto de lo negociado antes del 19 de mayo, el día previo al cierre de la exportación que luego derivó en el “cepo cárnico”. Hay que tener en cuenta que esta categoría se ve afectada porque algo de la carne que se produce por su faena se vendía a China.
Cuando se observa la evolución del Índice Novillo Mercado de Liniers, se observa que el cierre temporal de exportaciones instrumentado a partir del 19 de mayo logró “cortar” el proceso alcista que venía experimentando la hacienda. Sin embargo, desde entonces el mismo siguió fluctuando en niveles similares a los registrados antes de la restricción oficial. Esta semana, sin embargo, ese indicador ya comenzó a mostrar una tendencia bajista que podría buscar nuevos mínimos.
Para el novillito, destinado mayormente al mercado local, la baja en ese período fue de 12%, mientras que para la categoría vaquillonas fue de sólo un 3%. En estos dos casos lo que incide en la caída es el menor poder de compra del consumidor argentino y el “efecto contagio” de la incertidumbre generada por el “cepo cárnico”.
Pero los precios de las vacas fueron los más perjudicados por el cepo. La categoría de vacas buenas, que son las de mejor condición física y, por lo tanto, de mejor rendimiento en la faena, se vendían antes del cierre a 120/130 pesos, mientras que ahora se negocian en promedio a 100 pesos. Es decir: caída fue de hasta el 30%. En tanto, las llamadas vacas tipo conserva y manufactura, que habían encontrado en la demanda de China un cliente que pagaba bien por un producto que el criador descartaba, se pasaron de valer 110/120 pesos a los actuales 70/80 pesos.
Esa baja afecta no sólo a los criadores, quienes desde inicios de 2020 estaban recuperando rentabilidad, sino también a los tamberos que, con la venta de la vaca de descarte, lograban obtener un ingreso que en los últimos años venía creciendo en términos relativos a la facturación de la leche.
En el Mercado de Liniers la demanda está operando con tranquilidad y entre los consignatarios la cara es de preocupación. “Estamos en un momento muy complicado, esta baja es consecuencia del cierre de exportaciones, una medida desafortunada”, dijo a Bichos de Campo el consignatario Carlos José, Colombo (hijo).
El operador agregó que “esto afecta especialmente a las vacas en todas sus categorías” y que “las ventas hoy estuvieron muy difíciles; cuando se hacen los remates, no hay nadie levantando las manos para llevar esas haciendas y no se sabe cuánto más va a bajar y al hablar con los frigoríficos tampoco tienen claro cuándo ni cómo termina esto”.
Del lado de la exportación, los frigoríficos que tenían carne lista para despachar y con el permiso de embarque oficializado, se ven obligados a desarmar contenedores para dejar en el mercado local los cortes que ahora están prohibidos vender. Adicionalmente, algunas industrias exportadoras cuentan con las cámaras de frío colmadas de cortes congelados que no pueden enviar al exterior pero tampoco colocar en el mercado local porque se trata de una mercadería que no tiene demanda interna.
Pero además nadie tiene en claro la “letra chica” de las nuevas regulaciones, lo que llevó al freno o reducción de las faenas en diferentes plantas exportadoras, algo que termina perjudicando al sector de los trabajadores.
Acá en San Rafael en la isla del río diamante aycjente que esta comprando carne que no está en buenas condiciones pero se la comen igual pobres desafortunados así que me parece que por muy dura se puede vender igual a un precio menor que la de novillito pero bueno ustedes son los que saben
Buena noticia. Espero que baje mucho más.
Realmente el gobierno Argentino profundiza día a día la brecha entre los productores y el pueblo argentino todo. En plena Crisis política, económica, sanitaria y social deberían ponerse a trabajar enserio para sacar el País adelante y no undirlo en un desabastecimiento sin límites. Perderán mercados internacionales de valor, crean dudas e incumplimiento en las obligaciones contraídas. A la región le sirve, se ven beneficiados por los horrores del Gobierno Argentino. Es lamentable, causa dolor ante tantísima desidia por el que trabaja dignamente. Uruguay espera la ola de Argentinos con ganas de trabajar y desarrollarse en un mercado ávido de negocios y de seguridad institucional. Abrazo y el mejor de los deseos en este momento de insertidumbre y pesar! Téc. Agrop. Carlos Oyanarte. Paysandú-Uruguay.