Por Nicolás Razzetti (@NicoRazzetti).-
En enero pasado, la faena vacuna llegó a 1,123 millón de animales. Se trata de la mayor oferta de ganado que ingresa a los frigoríficos en la era Macri, solo superada por el dato de octubre del año pasado.
En cuanto a la producción de carne vacuna, los datos de Agroindustria indican que el mes pasado se llegó a las 255 mil toneladas. También en este caso fue de los registros más altos, ya que únicamente fueron superados por los registros de octubre de 2017, aunque solo por 2 mil toneladas.
La mayor oferta de gordo obedece a diferentes motivos. Por un lado, los feedlots siguieron ofertando hacienda. “El nivel de encierre sigue siendo alto. Los datos oficiales indican que en encierre en los corrales supera al promedio de los últimos años”, explicó el consultor Víctor Tonelli.
Pero además comenzó a apretar la seca, que obliga a los productores a desprenderse de hacienda de forma anticipada, porque empiezan a escasear los pastos necesarios para mantener los bovinos en el campo.
A eso se agrega el menor interés por la reposición que ya se venía evidenciando en el último tramo del año pasado y que se profundizará por el impacto del clima seco.
La menor retención de vacunos se refleja en la alta faena de hembras, que significo en el primer mes del año el 44,6% del total. En este escenario climático, las posibilidades de que mejoren los precios más de lo que ya lo hicieron son acotadas, estiman los analistas.
El dato positivo en el primer mes del año lo dio la exportación. En enero se embarcaron 34.500 toneladas que representaron el 13,5% del total producido, el mayor porcentaje desde que comenzó el Gobierno de Cambiemos.
Los embarques de carne crecen por la mejora del tipo de cambio. La devaluación del peso fue del 10% desde inicios de enero, pero tuvo un traslado parcial al precio del novillo que aumentó 4%. Esa brecha mejoró la renta de la industria frigorífica que opera en los mercados internacionales.