La mayoría de la gente reconoce la popular marca Taragüi por la yerba mate, una de las más consumidas en el país y del mundo. Pero en el Establecimiento Las Marías, ubicado en Gobernador Virasoro, en el noroeste de Corrientes, también se produce una gran cantidad de té que se vende con la misma marca. La novedad que festejan allá es que están cumpliendo 70 años trabajando con esa segunda infusión, que no es autóctona. Y que han logrado una certificación socioambiental internacional muy valiosa.
“Este aniversario celebra la filosofía de una comunidad que demostró que es posible producir un producto de gran calidad en equilibrio con la naturaleza. Y el festejo es doble, porque la producción tealera de Las Marías logró la certificación Rainforest Alliance, un sello mundial que solo reciben las compañías que cumplen estrictos estándares sociales y ambientales”, destacó un comunicado de esa empresa.
A partir de septiembre de este año, Rainforest Alliance informó que comenzará a implementar el Estándar de Agricultura Sostenible 2020 en todo el mundo. La ONG internacional explica que mediante la certificación de sus actividades “las comunidades agrícolas y forestales con las que trabajamos están en primera línea de algunos de nuestros desafíos más urgentes: cambio climático, deforestación y pobreza rural. Por esta razón, estamos reinventando la certificación como un viaje de mejora continua, fortalecido por técnicas de monitoreo avanzadas e intervenciones complementarias”.
Según Las Marías, a ellos no les costó casi nada de esfuerzo obtener esa certificación. “El equipo de trabajo no tuvo que ajustar ninguno de sus procesos para recibir este sello. El trabajo que realizaban ya era suficiente”, se ufanó la yerbatera.
La firma cree que todo es motivo del buen trato que dio a su personal, en armonía con el cuidado de la naturaleza, en estos 70 primeros años de historia de sus tés. En realidad, Las Marías existe desde 1924 y pronto cumplirá su centenario, ya que fue en aquel año cuando Víctor Navajas Centeno decidió plantar los primeros yerbales en la pequeña estancia ganadera que había heredado. Pero en 1950 también incorporó el té a su paleta de negocios, que se completa con la forestación y la ganadería.
La certificación RA lograda por Las Marías tiene varias argumentaciones detrás. Según la propia empresa estas son:
- Desde los inicios de la empresa, sus fundadores impulsaron el diseño de barrios para alojar a las familias de los trabajadores.
- También crearon el Club Taragüi donde se busca sumar a la integridad de los colaboradores y sus familias a través del deporte.
- La empresa cuenta con un servicio médico que implementa y proyecta distintas políticas sociales y de salud hacia su personal.
- La educación es otro de los grandes pilares a través de la Fundación Victoria Jean Navajas, que gestiona la Escuela Victoria donde más de 400 alumnos asisten cada año en forma gratuita.
- También funciona el Instituto Agrotécnico terciario, un Centro de Formación Profesional especializado y un Programa de Proyectos Educativos orientado a financiar capacitaciones docentes para escuelas de Corrientes y Misiones.
- En materia de cuidado del ambiente, el establecimiento cuenta con más de 3.700 hectáreas de reserva natural preservadas íntegramente donde especies vegetales y animales autóctonos como lapachos, ibira, ñangapiry, juncos, camalotes, entre los primeros, y monos, pumas, carpinchos, yacarés, además de una infinidad de aves.
- Las Marías produce además 12 mil toneladas de compost por año, provenientes de sus procesos de elaboración que utilizan como abono orgánico para mantener la vida y fertilidad del suelo.
- En materia energética, en los hornos de los secaderos de té y yerba mate, se utiliza como combustible la biomasa que proviene de su aserradero.
Néstor Galvalisi, el gerente de Producción Primaria de Las Marías, contó que “nuestro primer yerbal tiene 95 años y sigue produciendo. Este es uno de los ejemplos que demuestra la atención y cuidado que le dedicamos a todos nuestros procesos, desde el vivero hasta la ronda matera”.