El plan de contingencia para las zonas bonaerenses que están inundadas que diseñó el gobierno nacional, y que anunciaron con toda pompa el jefe de Gabinete Manuel Adorni y la ahora ex ministra de Seguridad Patricia Bullrich, contemplaba el envío de fondos, maquinaria y personal, y la reactivación de obras hídricas importantes.
Los anuncios se realizaron el 5 de noviembre. Sin embargo, pasado más de un mes de aquella fecha y con inundaciones que aún no dan tregua para los municipios del centro bonaerense, en la zona aseguran que, si bien han llegado algunos camiones volcadores y retroexcavadoras a varios lugares, aún no hay novedades del dinero. Bullrich, cuando desembarcó en la zona afectada de 9 de Julio, dijo que se iba a conformar un fondo de 1.900 millones de pesos con recursos de la Ley de Emergencia Agropecuaria.
Se suponía que el gobierno le daría cierta celeridad al envío de ese dinero, ya que la zona atraviesa una compleja emergencia y la plata debía destinarse a comprar insumos urgentes, como piedra o gasoil, que siguen saliendo de los bolsillos de los municipios o de los propios productores. Pero en la zona afectada no apareció ni un peso. Por ejemplo, en 9 de julio, epicentro de la emergencia, se esperaban desde hace semanas unos 170 millones de pesos, pero todavía no había noticia.
Ante una consulta específica de Bichos de Campo por este asunto, fuentes oficiales confirman desde el gobierno nacional que la pelota quedó picando en la Secretaría de Agricultura, que es la que deberá procesar los pedidos ya tramitados por los mandatarios locales para poder cumplir con una de las principales promesas que hizo Bullrich.
“Le están metiendo mucha velocidad. Ya está cerrado el convenio y está toda la documentación presentada. La idea es pagarlo lo antes posible”, explicó el director de Apoyo Federal a Emergencias (AFE), Santiago Hardie, que tiene a su cargo la coordinación del apoyo que anunció Nación en la zona.
Sin dar precisiones en cuanto a plazos o fechas, Hardie explicó que, como el Fondo de Emergencia Agropecuaria pertenece a la órbita de la Secretaría de Agricultura, es el equipo que comanda Sergio Iraeta el que tiene ahora la responsabilidad de avanzar con el trámite. El mismo funcionario confirmó que, del lado de los municipios, la tarea de solicitud de los recursos ya fue hecha.
“Como todo expediente, tiene todo un circuito lógico y tiene que pasar por distintos lugares, pero está avanzando bien”, aseguró.
La promesa del gobierno nacional fue asignar unos 1900 millones de pesos del Fondo de Emergencia Agropecuaria -que terminaron siendo alrededor de 2100 millones- a repartir entre las localidades afectadas. El destino que se le dará depende de lo que determine cada intendente, pues puede utilizarse para comprar combustible, cubrir costos operativos o hacerse de tubos y piedras para las obras.
Además de 9 de Julio, que solicitó 170 millones, y Casares, a donde se enviarían unos 100 millones, también recibirán fondos otros partidos no contemplados en el plan inicial, como Bolívar, 25 de Mayo y hasta Pehuajó.
En este último caso, de hecho, el intendente Pablo Zurro había denunciado públicamente su exclusión “por motivos ideológicos”, pero el propio Hardie confirmó a este medio que, si bien a ese municipio no se enviará maquinaria, sí está contemplado en el reparto del Fondo de Emergencia Agropecuaria.
Lo que asegura el funcionario, entonces, es que si bien inicialmente las medidas anunciadas por Bullrich estaban pensadas para los municipios de 9 de Julio, Carlos Casares, General Viamonte, Lincoln y Bragado, las localidades comprometidas en la otra cuenca (Saladillo-Vallimanca) son también tenidas en cuenta.
Cuando este medio, días atrás, había consultado a ruralistas y productores de Bolívar y 25 de Mayo sobre la ayuda de Nación, quedaba claro que en la zona no se daban por aludidos. Eso lo desmiente Hardie, que señala que en la zona de Del Valle, un pequeño pueblo ubicado entre ambas localidades, ya hay maquinaria de Vialidad Nacional trabajando.
“Anunciamos que íbamos a hacer epicentro el 9 de julio e íbamos a trabajar en la zona. Por supuesto que después siguió creciendo la necesidad y estamos colaborando. Todos los municipios van a recibir recursos del fondo y ya hay maquinaria trabajando”, destacó.
Desligado entonces de la responsabilidad por el envío de fondos, el titular de la AFE aseguró que, en lo que a sus funciones respecta, todo avanza conforme al plan.
“El objetivo del gobierno era recuperar la transitabilidad de los caminos y eso se está logrando”, señaló.
Lo cierto es que, cuando se le pregunta a productores y referentes de las localidades comprometidas, muchos dicen que, en su zona, la ayuda estatal ni se percibió y los caminos continúan intransitables. “Es posible, pero son las autoridades locales las que determinan a dónde se envían los equipos y qué trabajos se hacen”, respondió Hardie, tras ser consultado al respecto.
Y agregó: “Lo que hicimos fue sacar maquinaria de Vialidad Nacional asignada a otros lugares. Es un esfuerzo grande, es bastante equipamiento y siempre hace falta más, porque son muchos los caminos”.
Muchas veces se escucha al sector renegar porque los tiempos de la política no son los de la producción. Y mucho menos en medio de una emergencia de esta envergadura. Eso explica por qué quienes reclaman hoy por el envío de fondos son los vecinos y productores y no los jefes comunales, que saben de esos plazos y -como le comentó el intendente de Carlos Casares a este medio- cruzan los dedos para que los fondos lleguen antes del pan dulce navideño.
Entretanto, lo positivo es que Nación y provincia siguen trabajando coordinadamente, lo que era una incógnita cuando se anunció el plan de acción, a principios de noviembre.
Particularmente, asegura Hardie, el trabajo conjunto con Vialidad Provincial y los municipios es para la distribución de la maquinaria y la decisión de las obras a realizar. De ese modo, la ayuda de Nación suele concentrarse donde el ente bonaerense no envía ayuda, como es el caso de la maquinaria que recibió Casares de parte del gobierno de Kicillof y de la que fue enviada a 9 de Julio por Vialidad Nacional y el Ejército.
