El grupo Forres Beltrán es uno de los más importantes dentro de la industria frigorífica. Tiene 400 empleados y faena entre 15.000 y 18.000 animales al mes, cuya carne tiene final en el consumo interno y la exportación. Por eso sus integrantes estuvieron en Anuga 2025, feria que se hizo este año en Colonia, Alemania, y que cerró en las últimas horas.
Sus principales mercados de exportación son actualmente China, Europa y Estados Unidos. “El 60% de lo que producimos va a la exportación, y de eso el 70% va a China, un 15% a Estados Unidos y un 15% a Europa. O sea que en la faena hay mucha vaca si es que va tanto a China”, explicó Maximiliano Morello, el CEO del grupo.
En los últimos años, la importancia del mercado chino hizo que la cría vacuna ganara protagonismo, ya que además de ser la fábrica de terneros brinda la materia prima (la vaca de descarte) de las fábricas de carne. El criador es hoy el gran abastecedor de la demanda exportadora.
“La vaca hoy es el producto más demandado en la compra de la hacienda, al punto que ha llegado a valores históricos y muy cercanos a los del novillos”, agregó el directivo de Forres Beltrán.
En efecto, los mejores lotes de vacas se venden en precios cercanos a los 3.000 pesos por kilo vivo, cuando el novillo de consumo se negocia en 3100/3300 y el de exportación a 3300/3500 pesos.
“Esa muy bueno para el productor y es bastante complejo para nosotros (en referencia a las industrias), porque la exportación a China siempre se abasteció de una vaca más económica. Entonces con estos valores el negocio se pone un poco difícil”, indicó Morello.
En este mercado, explicó, el negocio estuvo complicado hasta mayo pero luego los precios mejoraron cerca de 30%. La cuestión es que la oferta de vacas en 2025 fue más baja que el año pasado y finalizado el invierno se redujo todavía más, lo que aumentó su valor y complicó la renta de la industria.
En cuanto a las ventas a Europa, otro importante destino en volumen pero sobre todo en valor, el directivo señaló que los negocios “vienen bien, aunque limitado a la cuota Hilton, ya que por fuera de ese cupo el número no da”.
Lo que se exporta dentro del cupo Hilton de cortes de alta calidad paga un arancel de más del 20% y a lo que se vende por fuera hay que descontarle un valor fijo 3.000 dólares, lo que deja a muchos fuera de mercado. Ese descuento agrega otra quita de 15%.
En el caso del mercado estadounidense, Morello indicó que “se trabaja dentro de la cuota, y fuera de ella es muy difícil. Hasta hace pocos días se plantearon negocios para nichos de alto valor en 10.000/11.000 dólares por tonelada, pero rápidamente bajaron los precios”.
La situación económica interna de los Estados Unidos y los conflictos mundiales están rediseñando el comercio global de carne vacuna.
Morello ve un mercado mundial demandante y con buenas perspectivas “pero parece que hubiera una encrucijada: hay buenos precios internacionales, pero al haber poca oferta en Argentina, la competitividad de la industria está siempre en juego, en riesgo”, sostuvo.
La pregunta es cómo se sale de esa situación. “Es clave que haya más oferta de ganado, que siga habiendo buenos precios” y que se corrijan “cuestiones fiscales”. Este ordenamiento debería llevar a los productores a invertir en una mayor oferta de terneros y en definitiva al crecimiento de la materia prima industrial.