Del lunes a hoy, todas las fichas terminaron de acomodarse en el tablero del gobierno. Para tranquilidad del quinto piso del ministerio de Economía, Estados Unidos anunció un swap de 20.000 millones de dólares frescos -”sin condiciones”, dicen-, y casi en paralelo se alcanzó el objetivo de los 7000 millones de exportaciones de granos sin retenciones.
Para un modelo que venía en jaque y fuertemente cuestionado por el mercado, con suba del tipo de cambio, derrumbe de los bonos y números en rojo en el Merval, este es un respiro importante. Y una cuota poco despreciable la aporta el agro, que en cuestión de horas cubrió el cupo dispuesto por el gobierno para engrosar las cuentas del Tesoro.
“Es una medida oportuna pero que muestra cierta fragilidad del modelo”, evaluó el consultor económico y financiero Leonardo Piazza. Oportuna y oportunista, podría decirse, porque ha sido una buena señal para el campo -que ahora sabe que tan utópico no es trabajar con 0% de retenciones- pero a la vez una evidencia de que el proyecto de Luis “Toto” Caputo tiembla cuando no hay suficientes reservas y sale a buscarlas de donde sea necesario.
Lo cierto es que como fue tan rápida y abultada la venta de granos, la eliminación de retenciones sólo rigió formalmente por 24 horas. Así y todo, Piazza asegura que “más allá de la temporalidad, viene muy bien porque genera flujos de caja positivos y mejora la rentabilidad”, por lo que el impacto en absoluto será negativo para quienes pudieron aprovecharlo. Es decir, las grandes exportadoras.
Ahora bien, ya son varios los especialistas que opinan que ahora el Palacio de Hacienda debe “hacer los deberes” y no jugarla de “taquito” como hizo cuando el mercado estaba calmado, negándose a sumar reservas por miedo a presionar sobre el tipo de cambio.
“El gobierno tiene que recalcular el modelo económico y aprovechar la oportunidad”, opinó el consultor, que considera que es un buen momento para que el Tesoro compre dólares, deje flotar su precio libremente y baje las tasas de interés para que no sea descabellado endeudarse para producir.
“¿Sabés lo que sería para el campo? Te da gana seguir produciendo más, de expandirte, y de tomar más riesgo del que tomás”, afirmó.
Aunque es temprano aún para adelantarse a los próximos movimientos, lo más lógico para un productor de a pie, que no se vio directamente beneficiado por la fugaz eliminación de retenciones, es que al menos reciba el “coletazo” positivo por la acumulación de reservas.
“Hay que dejar de pensar al mercado de capitales como un mercado de oportunistas de bonos o de carry trade”, expresó Piazza, que cree que, ahora más que nunca, el gobierno debe aprovechar el “espaldarazo yankee” y los dólares frescos del campo para generar previsibilidad y condiciones para producir. Que no sea todo “timba”, en resumidas cuentas.
Mirá la entrevista completa con Leonardo Piazza:
En paralelo, opina el consultor, ese giro económico tiene también su costado político y legislativo, porque con los mercados más calmos hoy Casa Rosada debería tender más puentes con los gobernadores -que han demostrado ser jugadores fuertes en las urnas- y avanzar con reformas más profundas.
“Si adquiere el rumbo adecuado y no se carga de soberbia con este apoyo que recibe, yo creo que estamos en un momento bisagra y pueden venir muy buenas noticias”, concluyó.