Una situación insólita se está registrando en el mercado argentino de trigo: los exportadores no registraron a la fecha una sola tonelada del cereal correspondiente al ciclo 2025/26 que comenzará a recolectarse en diciembre próximo.
Las registraciones de Declaraciones Juradas de Ventas Externas (DJVE) de trigo 2025/26 –procedimiento administrativo indispensable para poder realizar embarques– es nula, al tiempo que los exportadores ya compraron por anticipado trigo de esa campaña por más de 2,10 millones de toneladas, de las cuales 1,64 millones tienen precio abierto (operaciones “a fijar”).
La regularización del régimen de liquidación de agrodivisas –instrumentada desde el pasado 31 de julio junto con la reducción de las retenciones– no generó incentivos para declarar exportaciones de trigo 2025/26.
Durante el mes de julio las compañías agroexportadoras, luego de registrar embarques de trigo –también de cebada, malta o harina de trigo– tenían un plazo de hasta 30 días hábiles para ingresar el 90% del monto de la operación registrada. Pero desde el presente mes de agosto el plazo máximo para liquidar divisas regresó al nivel habitual: 30 días desde el momento de cumplido el embarque.
El sistema normativo presente en la Argentina permite registrar exportaciones –con hasta un año de plazo de embarque– fijando con anticipación el monto por liquidar y la alícuota del derecho de exportación en función del día de registro de la operación a partir de los valores FOB oficiales publicados por la Secretaría de Agricultura.
Por lo tanto, si los exportadores prevén que el precio de un producto agroindustrial subirá al momento de la cosecha, lo lógico es que adelanten registraciones, mientras que la situación inversa se presenta cuando prevén que los valores caerán.
El precio FOB oficial publicado hoy por la Secretaría de Agricultura para los embarques de trigo 2025/26 (noviembre 2025/enero 2026) es de 231 u$s/tonelada, una cifra no muy lejana de los 235 u$s/tonelada correspondientes al presente mes de agosto.
Es decir: si en cosecha –por poner un ejemplo– se produce una avalancha de trigo y el valor FOB del cereal argentino cae a 200 u$s/tonelada, entonces, en tal escenario, no tendría sentido alguno fijar operaciones por anticipado con un valor de 231 u$s/tonelada.
La siembra de trigo argentina 2025/26 ya finalizó para cubrir un área de 6,70 millones de hectáreas (contra 6,30 M/ha en el ciclo anterior, según la Bolsa de Cereales de Buenos Aires) y por el momento las condiciones del cultivo en la mayor parte de las regiones evolucionan favorablemente.