Luego de una nota publicada por la revista especializada THC, seguida por otra de Bichos de Campo, el gobierno nacional reaccionó y anunció hoy la prórroga por 60 días del vencimiento del registro de operadores de cannabis medicinal, para todas las categorías, dentro del Registro Nacional de Comercio y Fiscalización de Semillas (RNCyFS).
Tal y como dio cuenta este medio días tras, el marco de legalidad dentro del cual muchos se dedican a desarrollar y cultivar genéticas de Cannabis sativa L. iba a dejar de ser tal desde el mes de junio, tras el vencimiento del permiso provisorio otorgado por la Agencia Regulatoria de la Industria del Cáñamo y del Cannabis Medicinal (ARICCAME).
Aquel organismo descentralizado, dependiente del Ministerio de Economía, modificó el año pasado el marco para el otorgamiento de los permisos correspondientes, mediante la Resolución 1/2024, y estipuló que solo se enfocaría en la “producción agrícola e industrialización de semilla, grano y fibra de cáñamo (no psicoactivo)”, y en la “producción agrícola e industrialización de flor y biomasa de cáñamo (no psicoactivo)”.
Amparado en esta decisión de la ARICCAME, el Instituto Nacional de Semillas (INASE) frenó la re-inscripción de operadores, lo que generó temor y numerosos reclamos dentro de la industria del cannabis, ante el temor de que eso dejara a la actividad bajo un manto de ilegalidad.
Pero la presión parece haber surtido efecto y hoy el sector respira. “Esta prórroga permitirá a ARICCAME definir el futuro de la industria de cannabis medicinal, sosteniendo la vigencia de las inscripciones de los operadores en el RNCyFS hasta el 31 de Julio de 2025”, señaló INASE en un comunicado, en donde aprovechó a marcar que la responsabilidad es ahora de aquella Agencia Reguladora.
Fuentes de aquel organismo oficial señalaron a Bichos de Campo que la decisión fue tomada durante el fin de semana y confirmaron que mañana se reunirán con representantes del Consejo Profesional de Ingeniería Agronómica (CPIA) para aclarar la situación y discutir los próximos pasos.
En conversación con este medio, el ingeniero agrónomo especializado en cannabis medicinal y cáñamo industrial, e integrante de la Mesa de Cannabis del CPIA, Rodrigo Maltz, dijo ante esta noticia: “Trae un poco de certidumbre, que es lo que estábamos pidiendo de todos los espacios. La actividad viene trabajando hace muchos años dentro de un marco legal en el cual mucha gente y muchas empresas han invertido muchísimo dinero. No era la locura de unos pocos que quisieron hacer algo que no se podía, sino que justamente el Estado estaba promoviendo esta actividad. Lo que estábamos pidiendo era una continuidad de las condiciones para poder avanzar con esta industria”.
A continuación, agregó: “En estos dos meses vamos a tener un gran desafío que tiene que ver con entender cuáles van a ser los requisitos del INASE, cuáles van a ser las condiciones de adecuación para poder continuar con la actividad”.
-Luego de esta decisión de INASE, ¿hay margen para girar y retomar el reclamo hacia ARICCAME, que fue quien apartó al cannabis medicinal en primera instancia?- le preguntamos al agrónomo, que mañana asistirá a la reunión del CPIA.
-Sí, yo creo que debería ser algo que reclamemos. Pero lo cierto es que todo lo que es cannabis medicinal, dentro de la ley 27.350, tiene todo un marco para poder seguir operando. Todo lo que tenga fines comerciales, entra dentro de la ley 27.669, que es justamente de la cual surge la ARICCAME como autoridad de aplicación. Pero la 27.350 ya tiene un marco legal como para permitir que la actividad, al menos de las genéticas, continúe. Igualmente yo creo que hay que insistir en que la ARICCAME se haga cargo del cannabis medicinal, que lo tome, que lo incluya dentro de sus atribuciones, que es algo que (el interventor Ignacio) Ferrari no quiere, al menos en una primera etapa.